*.- Pudo ser muerte incidental, dice Guerrero Castro
TIJUANA BC 14 DE NOVIEMBRE DE 2017 (AFN).- Aunque la autoridad municipal coloca como versión oficial que el asesino del oficial Antonio Juvera Ponce se suicidó luego de cometer el crimen, parapetarse debajo de un vehículo de un taller cercano y disparar contra los agentes, no hay elementos suficientes para acreditarlo de esa manera en la investigación, advirtió el coordinador de la Subprocuraduría de Investigaciones Especiales (SIE) de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE), Miguel Ángel Guerrero Castro.
Respecto al homicidio ocurrido la madrugada de ayer en el bulevar Federico Benítez López, el funcionario explicó que las primeras investigaciones indican que tanto Juvera Ponce como su compañero de nombre José Antonio Sánchez patrullaban de forma rutinaria por una vialidad que conecta a dicha vialidad con el bulevar Gustavo D?íaz Ordaz, cuando vieron el vehículo de los responsables y les ordenaron detenerse.
Lo hicieron junto a los condominios de Infonavit La Mesa. Juvera Ponce se colocó del lado del copiloto y Sánchez del lado del piloto, y fue el agente posteriormente asesinado el que se dio cuenta de que los criminales estaban armados. Luego empezó un forcejeo mediante el cual el responsable hirió a Sánchez en el abdomen y en el brazo y mató a Juvera Ponce.
Sánchez pidió apoyo que de acuerdo a la versión ministerial llegó de inmediato logrando la detención del otro tipulante de la unidad. El asesino intentó huir a pie y se introdujo al área de los condominios para luego ingresar a un taller de carrocería, según se dijo.
Desde ahí, según la narración, hubo un enfrentamiento entre los policías y el delincuente que portaba un arma corta. Se dijo que se parapetó debajo de un vehículo, y que tras unos minutos los agentes se percataron de que el responsable dejó de dispararles.
Cuando lo buscaron lo encontraron muerto por herida de bala que ingresó por el mentón para salir de su cuerpo por la parte superior del rostro. Lo que la PGJE investiga, explicó el funcionario, es si realmente hubo un suicidio, los policías lo abatieron por legítima defensa, o si el asesino se disparó por error debido a la psicosis provocada por la persecución en la que se vio envuelto luego de matar al policía.
“Si fue suicidio o inclusive si se le hubiera disparado el arma a él” es lo que determinarán las investigaciones, expresó Guerrero Castro, quien informó que el hombre era de complexión obesa y se encontraba debajo de un vehículo por lo que presumen que la incómoda posición pudo repecutir en que se hubiera disparado de forma involuntaria.
“Tenía antecedentes por narcomenudeo y se habla de distribución de droga en el área de La Mesa”, explicó. La labor de investigación – agregó – tiene el interés de confirmar o desmentir el Informe Policial Homologado. Según el funcionario, es la tercera muerte de un policía que es investigada por el Ministerio Público durante este año.