TIJUANA BC 3 DE OCTUBRE DE 2017 (AFN).- A Josué “N”, presunto responsable de asesinar con un soplete hechizo con una mina de gas, a una madre y a su hijo, fue capturado en una cuartería en la que vivía con su hermana en una comunidad del Estado de Guanajuato, cercana a la ciudad de Celaya. 

José María González Martínez, subprocurador de Investigaciones Especiales de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE), informó que el sujeto fue ubicado de forma exacta desde el viernes 29 de septiembre, sin embargo no fue hasta el lunes 2 de octubre cuando se cumplimentó la orden de aprehensión correspondiente. 

Josué “se mostró sorprendido” pero no opuso resistencia al momento de ser asegurado por los oficiales de la Ley, aseguró el funcionario en una rueda de prensa realizada la mañana de este martes. 

Josué llevaba tres meses prófugo luego de cometer el crimen el pasado 5 de julio, en la vivienda en la que radicaba su pareja sentimental, Karen Flores de 25 años de edad y su hijo Jared, de 5 años. El hogar estaba localizado en la colonia Mariano Matamoros, localizado en la Zona Este de la Ciudad. 

A Josué, quien es apodado “El huevo”, lo rastrearon en esa entidad del centro de México a través de su hermana, que vivía allá. 

“Se empezó a monitorear a los miembros de su familia y a una hermana que vive allá y así fue como precisamente se le vio en el domicilio”, dijo. Señaló que la hermana de “El huevo” no está siendo investigada por encubrir a su hermano durante los aproximadamente dos meses que estuvo en Guanajuato. 

Al sujeto se le juzgará por el homicidio de Jared, mientras que la muerte de Karen – sucedida tiempo después en un hospital de la ciudad de Guadalajara – será juzgada como feminicidio, debido a que al ser pareja sentimental de la mujer, cumple con las características de ese tipo penal en particular. Cabe destacar que en 2017 la PGJE ha abierto 11 carpetas de investigación por el delito de feminicidio. 

Por otro lado, Martínez González informó que este año en el Estado se han registrado 15 asesinatos de menores de edad en el Estado, 10 de los cuales han tenido lugar en Tijuana; solo ocho de los crímenes han sido juzgados. Con esos números, se igualan las cifras de todo el año pasado.

El funcionario explicó que corresponderá a un juez de control determinar la situación jurídica de Josué “N”. La pena para el delito de homicidio oscila entre los 25 y los 40 años.

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