Tijuana BC 17 de febrero de 2015 (AFN).- Para la homosexualidad o el lesbianismo no existe una píldora que pueda quitarlos, por lo cual no se considera contagioso como "una gripe", señaló Sergio Ruvalcaba Carlos de Black, coordinador político de la Comunidad Cultural de Tijuana LGBTI (Cocut), en defensa de los matrimonios entre personas del mismo sexo.

En entrevista con Agencia Fronteriza de Noticias (AFN), Carlos de Black, manifestó su apoyo “al cien por ciento” a la diputada estatal Miriam Ayón Castro, quien presentó una iniciativa para “quitar los candados” a este tipo de uniones matrimoniales en el Estado de Baja California, lo que calificó como una iniciativa “muy buena”.

La misma, agregó, tendrá que pasar a consideración de los integrantes de la Comisión de Gobernación, en donde por tratarse de una propuesta de una mujer, "podría ser “congelada”; y de ocurrir esto, en la asociación civil que representa ya se están preparando y en su caso presentarán una iniciativa ciudadana, la cual no puede ser "congelada".

De Black refirió, y desmintió, las declaraciones del diputado local Rodolfo Olimpo Hernández, del Partido Encuentro Social (PES), quien  aseguró ante medios informativos que en diversos países daban "marcha atrás" a los matrimonios gay; ya que Dinamarca fue el primero en permitir los matrimonios entre personas del mismo sexo, después Alemania, Holanda, Francia, Inglaterra y España; y cada vez se unen más naciones a esta acción.

Lo anterior, dijo, se debe a que la humanidad se va dando cuenta de que realmente se cometen actos de discriminación hacia las personas homosexuales o lesbianas, situación que, a su juicio, debe de terminar pronto.

No es enfermedad

Carlos de Black manifestó que la homosexualidad "no es una enfermedad" y que “no existe una píldora para quitarlo”, además de que no se contagia a los menores, pues él tiene un hijo y su esposo una hija, además de sobrinos, y todos son heterosexuales.

Recordó que en los años ochentas se dio una propuesta de meter un campo de concentración a aquellas personas homosexuales o lesbianas por estar propensas a enfermedades como el Sida, tema al cual ya no se le dio seguimiento.

En relación a lo anterior, dijo que el 20% de la humanidad son homosexuales o lesbianas, otro 20% son heterosexuales, mientras que el 60% son “todos contra todos”, por lo que dijo que resultaba más fácil meter a un campo de concentración “a los retrógrados”.