*.- De un mes de nacido

TIJUANA BC 18 DE DICIEMBRE DE 2012 (AFN.- Juan José Anaya Betancourt y Laura Hernández Rivera, ambos de 18 años, fueron detenidos acusados de golpear a su bebé de un mes, porque no dejaba de llorar.

Agentes Especiales del grupo de Aprehensiones de la Policía Ministerial del Estado (PME), cumplimentaron una orden de aprehensión en contra de la pareja de esposos, y los pusieron a disposición del Juzgado Octavo de lo Penal, quien libró las órdenes de aprehensión por el delito de lesiones contra menores.

Anaya Betancourt es originario del Distrito Federal y Laura Hernández Rivera de Michoacán, y los hechos de que se les acusa sucedieron el pasado viernes 28 de septiembre del 2012.

Tanto Laura como Juan José se encontraban en su domicilio en compañía del bebé, que aún no está registrado, y como no paraba de llorar su padre le comenzó a dar de cachetadas con la mano abierta y con gran fuerza.

Ambos declararon que luego le cambiaron el pañal, y como el pequeño seguía llorando, Juan José, quien estaba en la cama con Laura, se fue a la cuna y se “desesperó por lo llorón del pequeño”, por ello lo sacó y le pegó varias cachetadas hasta que se cansó de golpearlo, luego la mamá continuo con la agresión, pero como el niño no paraba de llorar mejor lo dejaron en su cuna llorando durante aproximadamente tres horas, hasta que se quedó dormido.

Esa noche, el niño durmió con la cara enrojecida, y al día siguiente, el sábado, tenía la cara hinchada pero no le brindaron ayuda, fue hasta el domingo que al bebé se le comenzaron a notar moretones en el rostro, por lo que  la mamá decidió llevarlo al centro de salud, para entonces el menor ya presentaba problemas para respirar, por lo que fue atendido en el hospital.

Al tener conocimiento de los hechos, el agente del Ministerio Público inició la integración del acta por el delito de lesiones contra menores, misma que fue consignada con pedimento de orden de aprehensión, y una vez que se obsequiaron los mandamientos judiciales por el Juzgado Octavo, estos fueron debidamente cumplimentados por la Policía Ministerial.

Ahora ambos, padres se encuentran internados en el Centro de Readaptación Social de La Mesa en Tijuana, para que respondan por el delito que se les imputa, según el informe ministerial.