MÉXICO DF 13 DE DICIEMBRE DE 2012 (lasillarota.com).- Durante 2008, sucursales del Banco HSBC en Sinaloa enviaron mil 100 millones de dólares en efectivo hacia Estados Unidos, reveló la relatoría de hechos presentada este martes por el Departamento de Justicia contra ese grupo financiero ante una corte federal de Brooklyn, Nueva York.
 
De acuerdo con las evidencias, en 2007, empleados de HSBC describieron -a través de correos electrónicos- un esquema masivo de lavado de dinero ejecutado por empleados y ejecutivos de múltiples sucursales del banco en Sinaloa.
 
Se detalla que si bien la empresa cerró todas las cuentas involucradas y despidió a los empleados, siguió aceptando depósitos de dólares en efectivo en Sinaloa.
 
En el documento, se establece que para eficientar el depósito de las cantidades de billetes, los narcotraficantes diseñaron cajas especiales del tamaño exacto del espacio disponible en las ventanillas de las sucursales, de tal manera que el dinero no estuviera a la vista y los cajeros no tuvieran que abrir la puerta para llevarlo a la bóveda.
 
En la acusación se narra que los depósitos eran realizados como parte del negocio de compra de efectivo de HSBC, que llegó a controlar el 60 por ciento de este mercado a nivel global. Los fondos eran enviados a HSBC Bank USA.
 
También se indica que en febrero de 2008, el director General de HSBC México se reunió con el presidente de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) y el director de la Unidad de Inteligencia Financiera, donde se le informó que agencias mexicanas de procuración de justicia tenían una grabación en la que un capo del narcotráfico afirmaba que HSBC era el banco para lavar dinero.
 
Y es que se detalla que en 2008, solo 312 clientes, muchos de ellos de Culiacán, hicieron el 32 por ciento de los depósitos en efectivo recibidos por HSBC en todo México.

Fue hasta noviembre de 2008 cuando el banco dejó de realizar estas operaciones, pero durante ese año exportó hacia Estados Unidos, en billete o mediante transferencia electrónica, un total de cuatro mil 100 millones de dólares depositados en efectivo en México.