Tijuana BC 18 de marzo de 2015 (AFN).- El diputado panista Cuauhtémoc Cardona Benavides no descarta la intromisión de grupos externos con intereses partidistas y electorales en los hechos registrados desde ayer en San Quintín, donde centenares de jornaleros exigen mejores salarios y tratos dignos, por lo que “lanzó” un llamado al dialogo y a la civilidad.
Indicó que hay otras maneras de cómo resolver un asunto de esta naturaleza, pero de ninguna manera caer en los extremos de la violencia que en nada o nadie ayudan.
El legislador destacó que en el asunto de San Quintín siempre “hemos sabido que es un foco rojo” en términos de su condición de carácter social, pues convergen una serie de historias de grupos y de intereses sociales, la parte de las etnias, indígenas que es una comunidad muy importante de migrantes y que se ha asentado para bien en ese lugar.
También dijo que el gobierno que encabeza Francisco Vega de Lamadrid, en coordinación con el secretario General de Gobierno, Francisco Rueda y el presidente de Ensenada, Gilberto Antonio Hirata Chico, deben encontrar la manera de cómo conseguir unos niveles de interlocución más propositivos.
Por otra parte pidió a quienes “están detrás o de frente de toda esta emergencia social”, y a la ciudadanía a “no caer en provocaciones, pues estos tipo de movimientos tienen dos intereses.
El primero, el cual consideró “que verdaderamente vale la pena” es escuchar las causas sociales y demandas añejas; y el segundo que existe “gente que se quiere aprovechar por otro tipo de intereses inclusive ideológicos, sobre todo ahora que se aproxima el proceso federal electoral”.
Cardona Benavides no descarta que las inconformidades que se han expresado tengan un legítimo interés y origen, sin embargo insistió en quehay formas de hacer valer estas peticiones, través de un proceso de pacificación y civilidad.
“Yo no dudo que haya empresas a las que se tenga que supervisar, así como jornaleros que han presentado sus inconformidades y denuncias y que merecen darle un seguimiento puntual, pero no creo que sea una comunidad que viva en un grado de injusticia institucional”, dijo.