Por Enrique D. Sánchez Díaz
TIJUANA BC 28 DE JULIO DE 2025 .- Tijuana es la ciudad más insegura del país y la más corrupta, incluso por encima de Acapulco, Guerrero, señaló el abogado fiscalista Ignacio Anaya Barriguete, ex candidato a Senador del PVEM (2018), tras escuchar una exposición en el Colegio de Abogados Constitucionalistas con datos del INEGI.
“Así fue el dato que nos dió (Lic. Ricardo Zurita) en la reunión. “Y dice uno: ‘guau’ válgame Dios. ¿Cómo es posible?, ¿en qué momento se nos fue de las manos el buen ritmo y rumbo que teníamos por muchos años?, agregó el también ex candidato a diputado local del PEBC.
“En Tijuana la corrupción impera de manera aplastante. No se señaló de manera particular, si a nivel municipal, a nivel federal o a nivel estatal, sino en general. Que los actos de corrupción y los actos de violencia que se traducen en inseguridad pública para todos, Tijuana lleva la nota al día de hoy. Eso es terrible”, exclamó.
En entrevista con AFN, Anaya nativo del DF y residente desde niño en Tijuana, dijo que los índices de inseguridad han rebasado los límites de lo que nos podíamos imaginar. Donde la infiltración de los grupos de delincuentes, principalmente de narcotraficantes en las esferas del poder público, es por demás evidente”.
“Es tal la descomposición del país que siento que ya estamos tocando fondo. Quizá no lo veamos nosotros, pero que lo vean nuestros hijos. El hecho es que eso tendrá que terminar, el país no puede seguir así”, añadió.
El colmo de la crisis de violencia fue ver a la maestra jubilada y taxista (muerta) hincada ante un pelotón de sicarios porque no pagó piso. “Eso es una cosa espantosa”. Y también está fuerte en la entidad el cobro de piso. Uno se pregunta: ¿qué es lo que está pasando?, ¿cómo es que llegamos a esto?. ¿Qué nos pasó en este país? que llegamos a estos niveles de delincuencia, a esos extremos indecibles, impensables e inadmisibles. Es terrible y no es una cuestión pesimista, ésta es la realidad que estamos viviendo”.
Ésta es la entrevista completa con el abogado, contador, y único alpinista mexicano que ha logrado escalar a la cima del Everest en 2010.
DECEPCIONADO DE LO QUE SUCEDE EN EL PAÍS, ANAYA SE HA ALEJADO UN POCO DE LA POLÍTICA; “NO VOY A MENTIR”
Pregunta: ¿Por qué dejaste la política o solo te mantienes al margen?
Estoy estudiando una tercera licenciatura que estoy por terminar en la UABC y eso ha demandado mi tiempo y mi dedicación.
Pregunta: ¿Pero no has bajado la guardia?
Respondió: No estoy muy entusiasmado con la escena política que estamos viviendo en estos años. Para qué te voy a mentir, veo con cierta tristeza y desánimo cómo se han venido dando las cosas los últimos años en nuestro país. Y sí he estado, no apático, pero sí poco entusiasmado.
Pregunta: ¿Qué tan grave está la situación del país? qué te ha provocado ese impasse.
La verdad es que todas las personas tenemos nuestros propios procesos dinámicos. Todos me conocen, no soy una persona conformista ni quieta. Pero el ver las cosas que sucede en mi país y que aparentemente no encuentran salida para tantos problemas. Dice uno es un desgaste de energías y tal vez hay otros caminos donde se puedan hacer las cosas muy bien, sin necesidad de estar directamente en la política.
Recuerda que la política es para hacer las cosas muy bien o hacerlas muy mal, esa es la realidad.
LA INFILTRACIÓN DE GRUPOS DE NARCOTRAFICANTES EN LAS ESFERAS DE PODER PÚBLICO ES MÁS QUE EVIDENTE
Preguntas: ¿En estos momentos la política y el país están muy mal?
No están muy bien que digamos. Un país como el nuestro, con los índices de inseguridad que han rebasado los límites de lo que nos podíamos imaginar. Donde la infiltración de los grupos de delincuentes, principalmente de narcotraficantes en las esferas del poder público, es por demás evidente.
Donde aparentemente no hay una estrategia clara para combatir todo eso, sí nos genera ciertos desánimos y preocupaciones, es la realidad.
Y para acabarla de amolar, con estadísticas del INEGI, el viernes por la mañana el Lic. Ricardo Zurita nos los demostró en el Colegio de Abogados Ignacio Burgoa Orihuela: Tijuana es la ciudad más insegura del país y la más corrupta.
Así fue el dato que nos dió en la reunión. “Y dice uno: ‘guau’ válgame Dios. ¿Como es posible?, ¿en qué momento se nos fue de las manos el buen ritmo y rumbo que teníamos por muchos años?
“Ahorita es una cosa espantosa cómo está el país y la ciudad. Ya no nos escandalizamos de nada, ya pueden matar un chamaco, ya pueden violar una niña, ya pueden despedazar a una persona y pareciera que la sociedad ya se acostumbró a todo eso.
“ESA ES UNA COSA ESPANTOSA” LA EJECUCIÓN PUBLICA DE MAESTRA-TAXISTA; TAMBIÉN EN BC HAY COBRO DE PISO
Pregunta: ¿No será miedo por temor a las represalias? Ya viste en Veracruz hincada a una maestra jubilada y taxista ante un pelotón de sicarios porque no pagó piso?
“Eso es una cosa espantosa”. Y también está fuerte en la entidad el cobro de piso famoso”. Uno se pregunta: ¿que es lo que está pasando?, ¿cómo es que llegamos a esto?. ¿Qué nos pasó en este país? que llegamos a estos niveles de delincuencia, a esos extremos indecibles, impensables e inadmisibles. Es terrible y no es una cuestión pesimista, ésta es la realidad que estamos viviendo”.
Pregunta: ¿Qué pasa, la sociedad está dispersa, no hay líderes?
Sí, desafortunadamente estamos dispersos, tienes la razón. Apáticos como sociedad, ya no nos asusta nada, ya no nos preocupa nada. Si algo nos llega a pegar de manera directa a lo mejor levantamos la voz, pero nadie dice nada, estamos como observadores, viendo cómo se sigue descomponiendo todo el país.
ANAYA: NOS BRINCÓ EL TEMA, DE QUE EN TIJUANA LA CORRUPCIÓN IMPERA DE UNA MANERA APLASTANTE
Pregunta: Cuando informaron que Tijuana es la ciudad más violenta y más corrupta del país. ¿Dieron más detalles?
El viernes en la mañana en el Colegio de Abogados Ignacio Burgoa, estuvo Ricardo Zurita, quien ha participado en el famoso sistema anticorrupción que se creó en el sexenio de Enrique Piña Nieto. Un sistema que no ha rendido grandes frutos. Allí, narró, con algunas estadísticas del INEGI en cuanto a homicidios, robos y una serie de datos delictivos de Tijuana, dijo que está con 76 puntos sobre 100, a diferencia de otras ciudades.
“Creo que después le seguía Acapulco, Guerrero, que es una de las ciudades de las más corruptas, continuó diciendo. No entramos mucho en detalle porque se estaba alargando la plática. Pero sí nos brincó ese tema, de que en Tijuana la corrupción impera de manera aplastante”.
Y asentó: “No se señaló de manera particular, si a nivel municipal, a nivel federal o a nivel estatal, sino en general. Que los actos de corrupción y los actos de violencia que se traducen en inseguridad pública para todos, Tijuana lleva la nota al día de hoy. Eso es terrible”.
ESTADO OBLIGADO A DAR SEGURIDAD. NO SABEMOS SÍ ESTÁ INFILTRADO, ES INEPTO O CUÁL ES SU ESCUSA.
Pregunta: ¿Habrá alguna forma de revertir estos niveles de violencia y corrupción?, ¿qué tenemos que hacer los ciudadanos?
Una de las razones teóricas y reales del Estado, respondió, es que nos proporciona seguridad pública. Esa es la razón del Estado y esto no lo digo yo, ese es uno de los principales postulados desde del siglo XVIII y IXX que se concibió como hoy lo conocemos como el Estado moderno.
“Pero vemos que esa inseguridad que vivimos en gran medida el responsable es el Estado como institución, porque su función es brindar seguridad pública. Sin embargo no tiene capacidad para dar seguridad pública, por los motivos que sean, porque está infiltrado, porque es corrupto, porque es inepto, porque no quiere, ve tú a saber, hay miles de pretextos”.
Y si el Estado no nos está dando esa seguridad pública a los ciudadanos, remarcó Anaya, pues necesitamos cambiar el modelo de Estado que tenemos.
¿Qué rumbo seguir? No lo sé porque no hay un consenso nacional, no hay una unidad social, no hay un rumbo y no hay un modelo teórico en el cual se esté trabajando. Estamos totalmente apacibles y la sociedad como empantanada. Estamos viendo nada más lo que está pasando, no estamos activos, esa es la realidad.
ESTADO DICE “TODO ESTÁ BIEN”; PERO NO HAY NADA QUE MUESTRE QUE ESTAMOS MEJOR QUE HACE 10 o 20 AÑOS
Tampoco hay líderes que hayan levantado la bandera para que vayamos por un rumbo distinto. Los líderes que hemos visto en los últimos años han resultado ser una desilusión también para nuestra gente. Y precisó: Lo hemos visto con las principales figuras más importantes de la política nacional, cómo han ido cayendo conforme pasan los años.
“El no aceptar por parte del Estado Mexicano el grado de crisis que estamos padeciendo, es el principal problema que no permite encontrar soluciones. Porque el Estado al decirnos que todo está bien y que vamos bien, que estamos en vías de la transformación y que todo está bonito, pues no es la situación real”.
Sin embargo todos los índices que estamos viendo y todas las señales que estamos viviendo, nos indican todo lo contrario. No hay nada nuevo, sustentó Anaya.
Fíjate, continuó diciendo, esto es muy importante: no hay nada nuevo, que nos diga que estamos mejor que hace 10, hace 15, hace 20 o 30 años. ¿En qué estamos mejor?, ¿en qué?. Yo no lo encuentro. Entonces no sé qué tendría que pasar para que despertemos.
Y añadió: Ya pasamos por una revolución terrible, donde murió más de 1 millón de personas. Surgió un régimen más o menos que dió un rumbo definido con todas sus fallas, pues era un régimen construido por humanos y por mexicanos, que somos complicados.
AHORITA SE SUPONE QUE ESTÁN CONSTRUYENDO UN NUEVO MODELO; LA REALIDAD ES QUE ESTAMOS PEOR
En algún momento se empezó a descomponer aquello, no sé si la falta de democracia, la falta de oportunidades, la suerte es que se perdió el rumbo. No sé exactamente ¿qué fue lo que pasó?. Pero ahorita que se supone, estamos construyendo otro modelo de país, pues dime ¿en dónde podemos ver que realmente estemos construyendo algo nuevo y mejor?.
Nada más, hay que voltear hacia atrás y ver si estamos mejor que hace 10 años o que hace 20 o que hace 30 años. Tristemente vamos peor, ese es el gran problema en nuestro país.
Y no es que necesariamente tenga que surgir una fuerza a fuerzas, sino porque es necesario para mantener el equilibrio y los frenos en el sistema democrático que estamos viviendo. Si no, no hay democracia.
Para que haya democracia se necesitan confrontación de ideas y confrontación de proyectos. Y por supuesto que se respete a quien gane y darle el apoyo de todos a un gobierno legítimo democráticamente.
Pero algún día va a tener que terminar. No sé cuándo, “pero siento que ya estamos tocando fondo”, quizá no lo veamos nosotros pero que lo vean nuestros hijos. El hecho es que eso tendrá que terminar, el país no puede seguir así, concluyó.
Esta columna no refleja la opinión de Agencia Fronteriza de Noticias, sino que corresponde al punto de vista y libre expresión del autor.