* Indagan si un tío fue el asesino

TIJUANA BC 25 DE MAYO DE 2013 (AFN).- Un niño de tres años, identificado como "Diego", murió ayer por la madrugada presuntamente a causa de golpes diversos, pues tiene huellas en el rostro y otras partes del cuerpo; las autoridades investigan a un tío del mismo como presunto responsable.

Óscar Cervantes Ramírez, de 29 años de edad, fue detenido por oficiales del distrito La Presa Rural como principal sospechoso del deceso de su sobrino, y remitido al Ministerio Público del orden común, autoridad que definirá si tiene alguna culpabilidad.

Alrededor de las 11:40 horas de ayer, la Central de Radio recibió un reporte por violencia doméstica en un domicilio del fraccionamiento Valle de San Pedro, se informó por parte de la Policía Municipal.

Agentes de la Unidad contra la Violencia Doméstica, de la Secretaría de Seguridad Pública Municipal (SSPM) se trasladaron al lugar y pidieron a paramédicos de la Cruz Roja que auscultaran a la criatura; el diagnóstico fue que había expirado casi hora y media antes, y por tal razón los municipales detuvieron a Cervantes.

Éste refirió que el niño estaba bajo su cuidado y que durante la madrugada lo oyó quejarse, por lo que abrió la puerta de la recámara del chico para estar pendiente de él; que durante las siguientes horas los lamentos se agudizaron y decidió revisarlo, que "Diego" se levantó pero perdió el equilibrio y al parecer sufrió un desmayo, y que en la caída se golpeó el rostro con la cama.

El hombre dijo que intentó reanimarlo y le dio varias cachetadas y dio a oler alcohol, después lo recostó para que descansara, y que alrededor de las 06:00 horas, al pasarlo a un sillón mientras preparaba el desayuno de sus dos hijos, de dos y tres años, se percató de que el menor no respiraba y que intentó resucitarlo con respiración de boca a boca.

Expuso que, asustado, pidió a su pareja sentimental, Marlet Villafuerte, quien acaba de llegar del trabajo, que llamara a la Cruz Roja y a la Policía Municipal.

Ante el Juez Municipal, la mujer comentó que Diego tenía hematomas y golpes en el rostro y varias partes del cuerpo, y que desde las 18:00 horas de ayer hasta la madrugada, Óscar y unos amigos estuvieron ingiriendo bebidas alcohólicas en el domicilio donde murió el niño.