TIJUANA BC 2 DE AGOSTO DE 2012 (AFN). Por considerar que la Policía Estatal Preventiva (PEP) realizó una detención irregular, el Juez Séptimo de Distrito, Ulises Torres Baltazar dejó en libertad a dos individuos que fueron detenidos el pasado 18 de junio, acusados de estar en posesión de drogas, en un domicilio de la colonia Las Torres, donde de nueva cuenta se encontraron varios kilos de enervantes, según informó el Ejército ayer.
 
Turnados por la Procuraduría General de la República (PGR), bajo el número 301 de 2012, Leopoldo Aguirre Hernández, de 47 años de edad, originario de Jalisco y Francisco Villa Valencia, de 41, oriundo de Michoacán, quedaron en libertad y se presume que regresaron para tratar de rescatar 1,088 kilos que habrían escondido, según refirió el comandante de la PEP, Carlos Gómez, quien se quejó de que varios de los individuos que detienen por relación con el crimen organizado, luego quedan en libertad por parte de los jueces.
 
AFN tuvo acceso al documento mediante el cual, el Juez dejó libre a los mencionados y en su opinión los agentes de la PEP no dieron aviso al Ministerio Público Federal sobre el hallazgo de droga que se hizo en el momento de la detención, actuando libremente, sin la presencia del agente federal para que diera fe de los hechos.

En la resolución del juez se puede leer: “En esta tesitura, resulta evidente que los hoy detenidos, no tuvieron a su alcance inmediato y libre disponibilidad, los trescientos siete paquetes restantes (una tonelada de mariguana), lo que torna a esa situación ilegal¨.  En consecuencia, el juez determinó su libertad después de aproximadamente 10 días de prisión.

Así mismo la resolutiva dice que “se aprecia que la diligencia que se menciona en el parte de hechos que practicaron los Agentes de la Policía Estatal Preventiva, se realizó motu proprio, esto es, no recibieron orden alguna por parte del agente del Ministerio Público respectivo, ni estuvieron acompañados por él”, lo cual, según se especifica, incumple con lo dispuesto en el Artículo 2º, fracción ll, del Código adjetivo de la materia.

En una plática sostenida con abogados éstos dijeron a AFN que el problema que se presenta es que los agentes de la PEP no están en contacto con los Ministerios Públicos Federales para que den fe de lo que localizan o incautan: “Quieren hacer labor de investigadores, cuando no lo son”, agregaron.
 
Calificaron como bueno el trabajo de la corporación, pero en lugar de decomisar, agregaron, ellos deben resguardar y solicitar que el agente federal otorgue una orden de cateo “así, explican, no se escaparían los presuntos delincuentes y los jueces no podrían liberarlos”.

Al final de la resolución el juzgador agrega: “En consecuencia, al no haberse respetado las formalidades esenciales del procedimiento en la práctica de las diligencias de averiguación que realizó la Policía Estatal Preventiva, es inconcuso que carece de valor probatorio el parte informativo de diecisiete de junio de dos mil doce”.

En resumen, el titular del Juzgado advierte que “tal vez” si sea la droga que dicen que les encontraron, pero al no tener las formalidades legales en la detención y del pesaje del enervante, el decomiso y parte informativo incurren en ilegalidades, explicó un abogado que prefirió no revelar su identidad.

Ayer, durante la presentación de resultados del Ejército Mexicano y la PEP en Tijuana, se habló del caso ocurrido ese 18 de junio en donde fueron arrestados los dos mencionados con diversas cantidades de mariguana. Al parecer  estos mismos condujeron a las autoridades a un domicilio en donde se encontró más de una tonelada del enervante y hace dos días, de nueva cuenta, desconocidos intentaron extraer droga del subterráneo del predio.