Mexicali BC 1 de diciembre de 2014 (AFN).- Héctor Sánchez de la Vega, director del Hospital Subzona número 12 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), señaló que el organismo no solamente pierde líquidos en tiempo de calor; la deshidratación es una reacción que se presenta cuando el cuerpo no tiene la cantidad suficiente de líquidos, produciéndose diversas alteraciones que podrían llevar al paciente a su hospitalización.
Explicó que no solamente el calor y el sol hacen que nuestro cuerpo pierda sus niveles de agua con más rapidez, sino también las enfermedades gastrointestinales y crónico degenerativas contribuyen a que los enfermos presenten esta anomalía, que de no atenderse a tiempo puede repercutir en la salud y ocasionar la muerte.
Refirió que los signos de alarma ante este padecimiento son sed intensa, diarrea, ojos hundidos, boca seca, llanto sin lágrimas, vómito, evacuaciones líquidas numerosas (más de tres por hora) y abundantes; por lo que se deben beber entre dos y tres litros de agua al día.
Enfatizó que en estos casos es necesario administrar Suero Vida Oral, dado que es un medicamento que ayuda a recuperar las sales y los líquidos que pierde el cuerpo; debido a que contiene los aportes correctos y electrolitos que requiere el organismo para mantener su funcionamiento adecuado.
Sánchez de la Vega precisó que en el caso de los lactantes, menores de un año y adultos mayores, si la deshidratación se acompaña de enfermedad diarreica y vómito, es un problema agudo que requiere atención urgente por tratarse de una condición muy delicada que puede ocasionar la muerte.
Sobre la preparación del suero, dijo que se deben lavar las manos con agua y jabón, verter un litro y medio de agua en una jarra y disolver el contenido del sobre; sin agregar saborizantes ni guardar para otro día, ya que el tiempo de conservación del líquido es de 24 horas y posteriormente hay que desecharlo.
Recomendó lavar muy bien con agua y jabón las frutas y verduras que se vayan a consumir, tener precaución con las carnes y mariscos; y mantener las medidas de higiene dentro y fuera de la casa.
Sánchez de la Vega apuntó que es importante que toda la familia sepa preparar el Suero Oral Vida, y resaltó que si el niño o adulto no mejora en las primeras 12 horas es necesario llevarlo a la Unidad de Medicina Familiar para su atención inmediata.