*.- Enfermos de cáncer, diabetes, VIH o hipertensión
TIJUANA BC 15 DE JUNIO DE 2021(AFN)- Asociaciones civiles en apoyo a la salud de personas con cáncer, VIH sida, diabetes e hipertensión solicitaron el acceso a la salud sin discriminación o prejuicios por parte de personal de los Hospitales Públicos en Baja California.
Directivos y fundadores de las asociaciones que brindan servicios médicos a dichos grupos, manifestaron que durante la pandemia la situación médica de estos pacientes se agravó, ya que cientos de ellos no recibieron atención, medicamentos o tratamientos, como consecuencia de la alta demanda de recursos y personal médico para atender la pandemia de covid-19 aunado a la discriminación y prejuicio del personal médico de diversos hospitales.
Lo anterior fue denunciado durante el Conversatorio de Derechos Humanos organizado por la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDHBC), en donde la licenciada Edith Pérez Velázquez Directora General de Pro Oncavi A.C, refirió que es importante la denuncia de los pacientes ante la CEDHBC si se presenta un caso de discriminación.
Juana Ortiz directora y fundadora de Casa Eunime por Tijuana BC, ,amofestó que diversos hospitales públicos no cuentan con un personal de salud capacitado para que escuche a la persona, ya que "se juzga antes de obtener información y no brindan atención debido a esa misma discriminación".
Ortiz señaló que es necesario informar a los pacientes sobre sus derechos, el derecho a la salud, añadiendo que es necesario un acceso a la información y una participación activa del personal de salud, ya que, si no se logra esto, difícilmente se obtendrá una buena atención a la salud.
“Nos hacen sentir que no nos lo merecemos, que no tenemos acceso a la salud, queremos que se haga más transparente el manejo de recursos económicos ya que no hay medicamentos básicos, y se molestan las autoridades cuando se les cuestiona acerca de estas compras de medicinas" afirmó Ortiz.
Marcela Merino directora general de Fronteras Unidas Pro Salud AC, hizo saber que el 60% de la población en Baja California vive con diabetes e hipertensión; también advirtió que otro de los grupos abandonados es el de las personas mayores, y el de los migrantes que no tienen ese acceso a la salud física ni mental.
