*.- Afirma Bladimiro Hernández
*.- Resultados al cumplirse dos años de gobierno estatal
*.- Prevenir más que castigar, un objetivo de la Contraloría
 
TIJUANA BC 13 DE OCTUBRE DE 2015 (AFN).- El segundo año de la administración estatal ha sido de consolidación en materia de contraloría social, a través del programa correspondiente para incorporar la participación ciudadana en la vigilancia directa del ejercicio de gobierno en aspectos tan importantes como el de la obra social, y a la fecha, unos 2500 comisarios sociales forman parte de ese ejército, informó Bladimiro Hernández, Contralor General del Estado.

Entrevistado en AFN POLITICO Y ALGO MÁS, el funcionario explicó que el gobernador Francisco Vega ha querido una contraloría más orientada a promover la participación social y garantizar mayor apertura.

En ese contexto, la dependencia ha designado a 2,500 comisarios sociales y formado 329 comités de Contraloría Social, que tienen en sus manos la enorme responsabilidad de auditar entre 400 y 500 millones de pesos en obra pública,  dijo por su parte Irais Vázquez, Subcontralora de la dependencia en la zona costa y responsable del programa Contraloría Social.

Son ellos la principal garantía de que las obras se someten a supervisión constante, para asegurar que se lleven a cabo con estricto apego a las normas que rigen la realización de la misma, sobre cuando se trata de recursos federales cuyo uso es muy vigilado.

En ese mismo propósito, la población participa evaluando el desempeño de los servidores públicos en aquellas áreas de servicio y atención al ciudadano, y aunque esto ha elevado el número de quejas, paralelamente se ha venido trabajando en la capacitación de personal en temas como la ética del servicio a la comunidad y la mejora continua.

El Programa Usuario Simulado contribuye  a eso mediante una evaluación de calidad a los servidores públicos. Durante 2015 se evaluaron 213 centros de atención mediante visitas a cada uno, de esta manera se tomó en cuenta la información y proceso del trámite, el desempeño del servidor público e infraestructura, generando informes ejecutivos para los titulares de 15 dependencias evaluadas. Dichos resultados permitirán diagnosticar la situación actual y emitir recomendaciones de mejora continua en el servicio, además de ser un programa aliado en la prevención de la corrupción.

Adicionalmente, la Contraloría puso en marcha este año el Programa Inspectores de la Honestidad dirigido a jóvenes estudiantes, a través de quienes se fomenta la cultura de la denuncia y la participación.

Esto tiene un efecto multiplificador importante en su entorno inmediato mediante la promoción de valores que ayudarán a generar una mejor cultura social.

Bladimiro Hernández hizo hincapié en que este enfoque es independiente de la responsabilidad que la Contraloría tiene de promover mayor transparencia, un mejor desempeño administrativo en lo interno, y el cumplimiento de las normas que buscan prevenir conductas irregulares y actos de corrupción.

En ese campo se ha venido actuado con rigor y como consecuencia, se han iniciado procedimientos administrativos a funcionarios de los diferentes niveles en el gobierno estatal.