CUIDAD DE MÉXICO 14 DE SEPTIEMBRE DE 2016 (La Silla Rota).- La titular de la Procuraduría General de la República (PGR), Arely Gómez González, dio por aceptada la renuncia de Tomás Zerón de Lucio a la dirección de la Agencia de Investigación Criminal (AIC).
En un breve comunicado, la procuradora reconoció los esfuerzos de Zerón de Lucio al frente de la Agencia, que integra tres áreas sustantivas de la Institución, como es la Policía Federal Ministerial, la Coordinación General de Servicios Periciales y el Centro Nacional de Planeación, Análisis e Información para el Combate a la Delincuencia (CENAPI) y le deseó éxito en sus proyectos personales y profesionales.
El pasado 18 de agosto, inconformes con la indagatoria que se sigue sobre el director de la Agencia de Investigación Criminal, Tomás Zerón de Lucio, los padres de los 43 normalistas desaparecidos de Ayotzinapa suspendieron el diálogo con la PGR y exigieron su renuncia.
Los familiares de los estudiantes desaparecidos aseguran que la investigación no muestra avances y que no les han presentado resultados. Por tal motivo cortaron la comunicación hasta que no les muestren resultados claros en la indagatoria.
El abogado de los padres, Vidulfo Rosales, dijo en rueda de prensa que las autoridades incumplieron en la conclusión de la pesquisa y en la determinación de la responsabilidad contra el director de la Agencia de Investigación Criminal por encubrir evidencias. El abogado aseguró que se esperaban resultados para la reunión de este mes y no se cumplió.
Tomás Zerón de Lucio, como director de la Agencia de Investigación Criminal (AIC) autorizó el traslado de la Ciudad de México a Cocula, Guerrero, de Agustín García Reyes “El Cheje” o “El Chereje" -presunto integrante de Guerreros Unidos y uno de los principales testigos de la PGR en el Caso Ayotzinapa- sin que lo acompañara su abogado defensor, y permitió que se descartarán restos óseos sin un peritaje, actuaciones que no reportó ni integró a la averiguación previa.
El responsable de la Policía Federal Ministerial, ocultó su “acto de investigación policial” por 18 meses a pesar de ser “legal”, sin embargo, lo tuvo que reconocer públicamente luego de que el Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) difundiera en abril de 2016 un video que documentó su presencia en el municipio guerrerense.
La actuación de Zerón de Lucio del 28 de octubre de 2014 en Cocula generó dudas, ya que al día siguiente, se hizo el hallazgo en el río San Juan de una bolsa con restos que presuntamente pertenecían a los estudiantes desparecidos, y de un hueso se logró la identificación de normalista Alexander Mora Venancio.
El Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) señaló que de acuerdo a los informes médicos, existen indicios de que “El Chereje" fue víctima de tortura antes y después del viaje a Cocula.
La trayectoria de Tomás Zerón de Lucio
De 2007 a la fecha, los resultados en el desempeño laboral del director de la Agencia de Investigación Criminal (AIC) de la Procuraduría General de la República (PGR), Tomás Zerón de Lucio, ha dejado mucho que desear.
De acuerdo con un recuento al trabajo de este funcionario federal elaborado por el periodista y académico, Ricardo Raphael, se da cuenta de su trayectoria, de sus dimisiones y de su fracaso laboral, que pone en le tela de juicio su permanencia en una de las áreas más importante de la PGR.
Uno de los primeros descalabros que evidencia Ricardo Raphael, en su columna de la edición de este lunes en el periódico El Universal, se remonta a 2007 cuando Zerón de Lucio tenía un puesto al alto nivel en la Policía Federal Preventiva (PFP).
En ese año, su jefe Genaro García Luna le pidió la renuncia a Tomás Zerón por un hecho que sucedió en Cananea, Sonora. En la madrugada del 15 de mayo de 2007, 12 camionetas último modelo recorrieron 200 kilómetros en dirección a Cananea.
En estas unidades, de acuerdo con diversos testimonios, viajaban 50 sicarios disfrazados de militares y agentes del AFI. Todo este movimiento fue captado en imágenes por la PFP, pero la autoridad no hizo nada y el resultado fue de 22 personas muertas y la detonación de más 57 mil proyectiles.
Incluso, se asegura que los criminales usaron las frecuencias oficiales de radio para advertir a la autoridad que no intervinieran, pues habría consecuencia. Al final, el caso trascendió a nivel nacional y ante la presión Genaro Luna pidió a la renuncia a cinco mandos, incluido Tomás Zerón.
Tomás Zerón no tardó en encontrar otro puesto burocrático de alto nivel en el gobierno del entonces gobernador del Estado de México, Enrique Peña Nieto, donde fue nombrado coordinador de Investigación y Análisis de la Procuraduría General de Justicia de aquella entidad.
Como responsable de esa área le tocó atender el caso de la desaparición de Paulette Gebara, una niña que las autoridades encontraron debajo de su cama, después de haberla buscado en todo el territorio nacional.
En 2010, ese caso tomó mucha relevancia nacional por el nivel tan cuestionado en las investigaciones, pues nueve días después de haber empleado toda la tecnología, incluso una intensa promoción en redes sociales, encontraron a la niña en misma habitación.
Según la versión oficial del Estado de México, la niña murió asfixiada aunque nadie creyó esa historia y “los responsables de fabricarla siguieron ascendieron en la espiral burocrática y en 2013 Tomás Zerón, ya con Peña Nieto en Los Pinos, fue nombrado director de la Agencia de Investigación Criminal (AIC), oficina que sustituyó a la antigua AFI.
Un año después, a Tomás Zerón le tocaría hacerse cargo del caso de la desaparición de los normalistas de Ayotzinapa y fue acusado de haber hecho diligencias de manera desaseada y en contra de la legalidad.
Es decir, se le acusa de haber “sembrado” pruebas y torturado a los presuntos responsables, con el objetivo de hacer cuadrar la “verdad histórica” de este caso.
“Sus antecedentes curriculares no lo defienden. Tampoco explican por qué sus jefes lo protegen como si se tratara de su mejor amigo”, escribe Ricardo Raphael.
