MÉXICO DF 15 DE FEBRERO DE 2016 (La Silla Rota).- El gobierno de Nuevo León presumió darle otra cara al penal del Topo Chico mediante un operativo realizado en las instalaciones posterior a la muerte de 49 reos producto de una riña entre grupos de la delincuencia organizada.

A través de un comunicado, y mediante un video institucional en redes sociales, la autoridad estatal dio a conocer que como resultado de dicho operativo, encabezado por el secretario de Seguridad, General Cuauhtémoc Antúnez, se detectó la instalación hasta de un bar al interior del penal, mismo que era administrado por un grupo delictivo.
 
Además, fueron retirados 280 puestos semifijos de alimentos y abarrotes que eran operados por la red criminal directamente o a través del cobro de piso, ofertando productos con sobreprecios de hasta un 120 por ciento.

"Celdas de lujo equipadas con salas, minisplits, pantallas, frigobares, televisión digital y hasta acuarios y baños sauna fueron desmanteladas por la corporación estatal”.

"Toneladas de objetos prohibidos, entre ellos muebles, aparatos electrodomésticos y colchones, fueron apilados en las canchas del centro penitenciario. El mobiliario fue retirado por maquinaria pesada y camiones", se lee en el documento.

Por su parte, el General Cuauhtémoc Antúnez informó que el penal del Topo Chico ya está controlado por parte de elementos de la Fuerza Civil.

"Conocimos todas las irregularidades que existían, arbitrariedades, abusos, cobros de piso”.

"Ellos (los internos) nos piden que ya cese eso, estamos dando esa garantía, ahorita ya tenemos el control con Fuerza Civil para evitar que esos vicios se vuelvan a suscitar. Todos los privilegios se acabaron", refirió el funcionario estatal.
 
Añadió que luego del cateo realizado el pasado jueves, Fuerza Civil destruyó cientos de altares de la Santa Muerte, que incluían figuras de tamaño real, cuadros y vestuarios similares a los de matlachines.

Lo que viene

A partir del lunes, agrega el comunicado, el Gobierno instalará mesas de asistencia jurídica en el penal para revisar cada uno de los casos de los internos, muchos de los cuales se encuentran pendientes de sentencia.

"Habrá aquí un equipo de abogados para que empiecen a analizar los expedientes de los internos que han manifestado que están de manera injustificada aquí.

"Para que ellos determinen si es correcto o no, les vamos a dar la certeza de que los estamos escuchando", subrayó Antúnez.