ENSENADA BC 20 DE FEBRERO DE 2018 (AFN).- Para el futuro hídrico de la ciudad primero se deberá analizar cuál es la alternativa que genere menores costos, ya que aunque el abasto que se proporcionará para esta ciudad mediante la nueva desaladora que tiene 98 por ciento en su construcción, habrá que pensar en otra alternativa a futuro para conseguir nuevas fuentes de abastecimiento, aseveró Carlos Loyola Peterson, director de la Comisión Estatal de Servicios Públicos de Ensenada (Cespe).
Loyola Peterson ofreció una conferencia ante el grupo Foro de Ensenada, A.C., donde reconoció se pudiera traer agua del Río Colorado a Ensenada mediante un acueducto de Tanamá al Valle de Guadalupe como una alternativa a la desalación.
Señaló que la determinación que se tome deberá estar ajustada a cuál es la medida más barata y que genere menor cantidad de gastos para los ensenadenses, y para ello, deberá analizarse cuál es la mejor alternativa, debido a que los costos de bombeo del Río Colorado, incluso pueden ser mayores que el pensar en otra desaladora, en especial por los costos de energía que generen, sin embargo, ese es un aspecto que se deberá de analizar.
Destacó que la desaladora que se construye en la actualidad en la ciudad de Ensenada ya está en sus últimas etapas para quedar concluida y aceptó que hay algunos aspectos relacionados con las corrientes marinas que generaron un rezago en su instalación.
Loyola Peterson indicó que para evitar improvisaciones en un tema tan delicado y fundamental en la vida de la comunidad, será necesario planear y tomar las mejores decisiones analizadas a conciencia e incorporarlas en una próxima presentación de un Plan Hídrico de Baja California.
El funcionario declaró que por desgracia se enfrenta con 10 años de déficit, que ha evitado tener estrategias que permitan determinar hacía donde crecer en materia de las políticas de agua potable para Ensenada.
Resaltó que deberá haber crecimiento en materia de dotaciones de agua y tener un análisis de las fuentes de inversión hacia el futuro, no solo en el rubro doméstico, sino para el desarrollo de la región.
“Sin embargo, para tener datos certeros, deben tenerse cifras apegadas a la realidad, pero en las estadísticas que se cuenta, a través del Consejo Nacional de Población (Conepo), la cantidad de habitantes en Ensenada ha estado en decrecimiento, aspecto que las políticas en materia de dotación de agua potable, sean en ese sentido, en incluso instancias como la Comisión Nacional del Agua. De acuerdo con las bases estadísticas de esta instancia, para el año 2035 Ensenada tendrá menos población que la que hay actualmente, y establece que esta se encuentra en una etapa de decrecimiento, utilizándose una base de planeación equivocada”, sostuvo.
Loyola Peterson consideró a Ensenada como la zona de Baja California con mayor problema en materia de agua potable de todo el Estado, pero que no significa que en un momento determinado, otros municipios de la entidad no lleguen a enfrentar problemas de abastecimiento en esta materia.
