*.- “No hubo buenas prácticas” en caso de Lomas del Rubí

TIJUANA BC 9 DE FEBRERO DE 2018 (AFN).- Ingenieros y arquitectos de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC) Delegación Tijuana reconocieron que hay una responsabilidad compartida entre autoridades de gobierno, desarrolladores y ciudadanos en el caso de los deslizamientos de tierra en Lomas del Rubí, pues dijeron “no hubo buenas prácticas”.

En la reunión de hoy, en la que dieron a conocer que estudiarán el hábitat del sector de la industria de la construcción de la región, estuvieron presentes Roberto Méndez Meza, Vicepresidente Nacional de los ingenieros en México; Gabriel A. Valenzuela Moreno, presidente de CMIC; Noemí Parra Buelna, jefa del departamento de ciencias de la tierra del ITT; y Manuel Becerra Lizardi, Presidente del comité de vinculación del departamento de Ciencias de la Tierra del ITT.

Abundaron sobre el tema de Lomas del Rubí, que aunque la evidencia parece apuntar a que hubo una descompensación de terracerías, hay que esperar a los resultados que den los estudios geofísicos y geotécnicos que se están realizando.

Expusieron que sí hay certeza de que la zona de Lomas del Rubí, estaba marcada como vulnerable en el mapa de riesgos de Protección Civil, además de que colonias aledañas fueron  clasificadas como no aptas para la construcción de viviendas. 

Mencionaron que Tijuana es zona topográfica muy difícil, pero que con ingeniería adecuada, como pilotes y bardas es posible resolver y evitar posibles derrumbes. Sin embargo, observaron, esto requiere una alta inversión de dinero, que muchas veces los inversionistas no quieren hacer con tal de “ahorrarse unos pesos”.

“Queremos ‘pedirle peras al olmo’, queremos hacer viviendas de interés medio sin invertir lo que realmente se tenga que invertir en infraestructura (…) no importa la zona, pero la ingeniería existe, no pasaría nada, por más inestable que esté el predio, si se hace la ingeniería adecuada”, manifestaron.

Por tanto, argumentaron que cuando se conoce que el terreno donde se va a erigir una construcción no tiene la resistencia adecuada, se deben seguir los procedimientos constructivos apegados a los análisis técnicos previamente hechos.

También señalaron que entre los ciudadanos prevalece la cultura de la autoconstrucción que se hace sin la supervisión de ingenieros o arquitectos especializados.

Indicaron que algunos factores que pudieron influir en los derrumbes de casas en Lomas del Rubí son las filtraciones de agua, que pudieron haberse dado por fosas sépticas, como las que se usaban en colonias antiguas antes de la instalación de servicios de tubería y drenaje. 

Agregaron que las invasiones de predios es un tema que debe revisarse a raíz de este hecho, pues consideraron que la autoridad no ha actuado enérgicamente en el control de esta situación. Una de las razones para esto, comentaron, es que retirar a alguien de un terreno sobre el que ha adquirido derechos sólo por el hecho de asentarse en él, requiere un trámite burocrático. 

Por último, añadieron que lo más importante en la cuestión de Lomas del Rubí es el tema social, pues no es posible que no se les dé una solución inmediata a los afectados. Dijeron que se debe pugnar por llegar a un buen acuerdo que redunde en un beneficio inmediato.