TIJUANA BC 23 DE NOVIEMBRE DE 2017 (AFN).- Los jueces deberían resolver los matrimonios entre personas del mismo sexo a nivel local, sin necesidad de que las parejas recurran a un amparo ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), opinó Blanca Barrientos Rivas, presidenta del Colegio de Abogados Emilio Rabasa. 

La jurista manifestó que se espera que con la puesta en marcha del Código Nacional de Procedimientos Civiles y Familiares, así como el Código Familiar de Baja California –que está siendo desarrollado por el diputado panista Miguel Osuna Millán- se creen figuras jurídicas nuevas y se agilicen los protocolos, principalmente en el ámbito de lo familiar. 

El tema de las adopciones y los retrasos –hasta de un año o más- de los juicios para que parejas puedan hacerse cargo de la custodia de un niño o niña sin hogar, son temas que deberían agilizarse buscando el bien del menor, expresó la abogada en entrevista para Agencia Fronteriza de Noticias.

Agregó que es frecuente que haya resistencia por los jueces locales para acatar disposiciones constitucionales o tratados internacionales cuando estos contravienen al Código Civil. 

La titular del órgano colegiado hizo un llamado al gobierno de Baja California a invertir en los Juzgados Civiles a manera de que estos puedan agilizar sus trabajos, ya que –dijo- la falta de recursos provoca que haya lentitud el tratamiento de los miles de casos que se llevan al interior de los mismos. 

“Es tanto el trabajo que no puede ser eficiente porque los jueces llevan miles de asuntos diarios”, dijo. 

Por su parte, José Manuel Castro Valenzuela, juez de primera instancia de lo civil en Tecate, destacó que es necesario que se aclaren los protocolos en materia familiar mediante el Código, y que los procedimientos “no sean tan enredosos”. 

El Juzgado Civil en Tecate tiene alrededor de tres mil 500 casos, que son administrados por poco más de diez empleados y un juez. 40 por ciento de los casos son de índole familiar, sobre los cuales, Castro Valenzuela contó que hacen falta “centros de convivencia establecidos” en los casos de juicio de patria potestad. Esos espacios están destinados en que padres o madres puedan convivir con los hijos de forma individual, para evitar actos de violencia entre los progenitores. 

Ante el déficit, el juez destacó la necesidad de que se abra un juzgado familiar cuyos juicios se lleven independientes al Juzgado Civil, para evitar la sobrecarga de trabajo. Además de que el Código Familiar defina los lineamientos y reducir la cantidad de ocasiones en que los jueces tienen que recurrir a una jurisprudencia. 

“Lo que se necesita es presupuesto”, sentenció.