MEXICALI BC 24 DE JUNIO DE 2016 (AFN).- El diputado José Alberto Martínez Carrillo señaló este día que los residuos electrónicos han tenido un crecimiento promedio en Baja California del 5 por ciento anual, y de seguir esta tendencia significaría que en 20 años se pasaría de una producción actual de 25 mil toneladas anuales a 50 mil.
Ante esta situación, agregó, es indispensable implementar medidas ágiles y eficaces en su tratamiento, a fin de evitar la dispersión de contaminantes y sus afectaciones en el ambiente y la salud de los bajacalifornianos.
El diputado destacó que ahora, gracias a la aprobación de una iniciativa que reforma diversos artículos de la Ley de Prevención y Gestión Integral de los Residuos, la Secretaría de Protección al Ambiente (SPA) se verá obligada a promover la creación de políticas públicas para un mejor uso de los desechos electrónicos, además de sugerir normas ambientales para regular su empleo integral.
Martínez Carrillo, impulsor de esta iniciativa, agregó que dicha dependencia también tendrá que realizar una promoción de la cultura, educación y capacitación ambiental e incentivar la participación del sector social y privado para las referidas acciones, además que ahora se incorpora también en la ley mencionada el concepto de “residuos electrónicos”.
Esto, dijo, se refiere a aquellos productos usados, caducos, retirados del comercio o desechados, manufacturados por las industrias de la electrónica o de tecnologías de la información, que requieren de corriente eléctrica o campos electromagnéticos para su operación o funcionamiento, y cuya vida útil haya terminado incluyendo los aditamentos, accesorios, periféricos, consumibles y subconjuntos.
El diputado agregó que el manejo adecuado de los residuos electrónicos, los materiales y sustancias que los conforman pueden ocasionar grandes daños al medio ambiente, así como en la calidad de vida de las personas, específicamente en su salud.
“Estos pueden causar cáncer de pulmón, daño renal, hepático; los metales se encuentran en las pantallas o tubos de rayos catódicos dañando al sistema nervioso central, riñones y huesos”, dijo.
