*.- Promueve un frente común progresista para ganar en 2018
*.- Rechaza visión de país de un solo hombre como promueve AMLO
*.- Fortalecer estado de derecho y replantear modelo de desarrollo económico
*.- Insiste en abrir debate para legalizar marihuana y reducir violencia

TIJUANA BC 25 DE SEPTIEMBRE DE 2015 (AFN).-  El gobernador perredista del estado de Morelos, Graco Ramírez Garrido Abreu, ratificó hoy aquí su decisión de buscar la candidatura presidencial de 2018 pero por un amplio frente de fuerzas progresistas, y con un proyecto que en vez de confrontar a los mexicanos, los sume para afrontar los grandes retos nacionales de reducir la violencia asociada al crimen organizado, fortalecer el desarrollo económico y dar mayores oportunidades a los jóvenes.

En ese apartado, insistió, se tiene que incluir la convocatoria a abrir el debate para despenalizar la marihuana, reducir la violencia asociada a la cadena de actividades hoy ilegales relacionadas con su producción y distribución, y evitar que miles de jóvenes mexicanos pierdan sus años más importantes de vida en prisión por delitos asociados a ello, en vez de dedicarlos al estudio y la vida productiva.

Entrevistado en AFN POLITICO Y ALGO MÁS, el hoy gobernador dijo que las cifras de resultados de su tercer año de gobierno estatal, son la muestra más clara de que se puede gobernar con todos y para todos. Reconoció que en todos los partidos hay gente buena y dispuesta por abonarle a la construcción de un mejor país, independientemente de su origen partidista, y decidió aplicar ese modelo localmente llamando a colaborar a morelenses profesionales y con capacidad para servir, indistintamente de su origen político.

“Para gobernar a un país tienes que sumar, no restar”, dijo Graco, en una de las primeras referencia a quien eventualmente podría ser su contrincante en la boleta de 2018, Andrés Manuel López Obrador, y de quien cuestionó su creciente visión autoritaria y mesiánica. Reconoció haber sido el promotor para que López Obrador renunciara al PRI en su momento, hoy cuestiona su visión del México de un solo hombre, o la de quien se presenta como quien puede salvar al país.

“No puedes buscar el voto pregonando que todos son corruptos menos yo. Cómo quieres un Presidente que diga quien no está conmigo esta contra mí, O que dice que va a revertir la reforma energética sin considerar las consecuencias. Si tenemos desacuerdo y violencia vamos a más desacuerdo y violencia”, manifestó el gobernador morelense “Cada vez va aflorando más esta cosa autoritaria y mesiánica”

Luego de recordar su militancia juvenil a los 20 años, y su paso por la cárcel y el Campo Militar Número Uno en los tiempos de la izquierda proscrita, Graco Ramírez se dijo convencido de que en todos los partidos hay gente buena y coincidente en el propósito de construir una mejor nación, y por eso convoca a discutir los temas nacionales con seriedad para sacar al país, “con la suma de muchos”

En esa agenda, añadió, debe replantearse el modelo de desarrollo económico para tomar en cuenta las diferentes realidades regionales y sus necesidades, y ofrecer por ejemplo a la frontera, un esquema que garantice su mejora buscando una menor dependencia del mercado norteamericano e incorporándose más al mercado interno, reforzando la economía nacional mediante la inversión privada nacional y extranjera.

En su visión, el país requiere el fortalecimiento del estado de derecho para que la ley se respete y se cumpla. También se necesita elevar la autosuficiencia alimentaria y reducir la dependencia en la importación de alimentos y combustibles.

Ramírez Garrido desestimó las afirmaciones de quienes anunciaban la debacle del PRD y sus posibilidades de competir en la próxima elección presidencial. Morena –ejemplifico- apenas logró 8 puntos de la votación, mientras el PRD tuvo 12 con 4 millones de votos y es hoy la primera fuerza de izquierda en el país, la tercera fuerza política nacional.

Más aún, con ese soporte y la suma de votaciones como las registradas por Movimiento Ciudadano y el Partido del Trabajo, se podría llegar a construir un gran frente progresista capaz de vencer a cualquier partido de los más fuertes.

La serie de cambios experimentados por el país en las últimas décadas, y en que las fuerzas progresistas han participado, lo llevan a la convicción de que en México, la izquierda es acuerdo y dialogo, no ruptura ni enfrentamiento, porque esto último llevaría al país a una situación peor.

En un país donde pasamos de un partido a muchos, de una iglesia a muchas, y de un concepto de familia al de familias, hasta la figura del Presidente mandamás se ha convertido en cosa del pasado,  y el más claro ejemplo es el contrapeso y equilibrio que ejerce la Conferencia Nacional de Gobernadores. Esa realidad demanda hoy una visión distinta para dirigir al país.

Graco Ramírez se encuentra de visita en Baja California para promover la inversión de bajacalifornianos en aquella entidad, donde los indicadores económicos han tenido una baja reciente debido a diversos factores, aun cuando en otros rubros como el de la seguridad publica los resultados han obtenido el reconocimiento nacional. En ese contexto consideró significativo que recientemente el propio Presidente Peña Nieto se haya referido a los avances alcanzados en materia de seguridad pública mediante el modelo de mando único, actualmente bajo el mando del bajacaliforniano Alberto Capella Ibarra.

“Capella es muy bueno, yo le sigo muy reconocido, es un hombre derecho, inteligente, entregado y sabe que yo no cedo, no me rajo”, añadió.