*.- Nuestro Estado está ubicado a nivel nacional como la segunda entidad con menor precipitación pluvial
Mexicali BC 1 de octubre de 2014 (AFN).- Baja California requiere de una atención urgente y decidida en el tema de almacenamiento y captación de agua, expresó la diputada Nereida Fuentes González, coordinadora de la Comisión de Energía y Recursos Hidraúlicos del Congreso del Estado.
Mencionó la diputada que Baja California se encuentra ubicada a nivel nacional, como la segunda entidad en menor precipitación pluvial, con sólo 203.7 milímetros de captación al año, por lo que exhortó al gobierno estatal para que atienda el problema que requiere el Estado en materia de obras hidráulicas, a fin de solventar la sequía.
Fuentes González refirió que de acuerdo a estudios realizados por el Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente, existen cuatro desafíos que tendrá que enfrentar la humanidad con mayor ahínco en los próximos años, como son la falta de agua potable, el calentamiento global del planeta, la deforestación y la desertificación.
En este sentido –abundó- Baja California se encuentra ubicada como una zona desértica, por lo que se deben construir rigurosamente obras de infraestructura hídrica que garanticen el suministro en el futuro, tanto para el consumo, como para la aplicación en sectores productivos, incluyendo el primario, que es el campo.
Exhortó al gobernador Francisco Vega de Lamadrid que instruya a los secretarios de Fomento Agropecuario, Infraestructura y Desarrollo Urbano, para que se avoquen a realizar estudios y elaboren los proyectos para la construcción de obras hidráulicas.
Nereida Fuentes expuso que en la actualidad se consumen en promedio 215 litros de agua por habitante - y se estima que en la Zona Costa para el año 2035, la población crezca a 4.5 millones-, por lo que requerirán de una dotación superior a los 355 millones de metros cúbicos por año, más del doble que ahora.
En este contexto, se vuelve un asunto de urgencia que se elaboren proyectos para lograr la captación de todas las corrientes de agua existentes, tanto en la zona rural como urbana, para lo cual se tendrán que construir las represas necesarias para interceptar, recolectar y almacenar el agua de lluvia, una alternativa que no sólo contribuye al aprovechamiento sustentable de este recurso y del suelo, sino que permitirá en un futuro reducir la total dependencia del Río Colorado.
Subrayó de igual manera, que se deben tratar esos 100 millones de metros cúbicos que son desperdiciados y adjuntarlos a los 228.7 millones que ya se reúsan en distintos rubros, como riego o actividades industriales.
