Tijuana BC 8 de mayo de 2014 (AFN).-El Secretario General de los Burócratas en esta ciudad, Manuel Oceguera Villa propondrá a los legisladores un Punto de Acuerdo para que se modifique la Ley de Responsabilidades de los Servidores Públicos que recién aprobado por mayoría, para poner un punto final a la crisis económica que han declarado que vive la administración estatal, en lugar de que se trate de perjudicar a los trabajadores de base.

  

El líder de la burocracia estableció que si realmente el Gobierno del Estado y los legisladores tratan de fabricar un plan de austeridad, se debe de llegar a la realidad: “no es culpa de los trabajadores estas finanzas”, éstas, agregó, han sido culpa de las malas administraciones y de los gobernantes, quienes al llegar al poder “retacan la nómina de compromisos de campaña”, en el sentido del capital humano.

  

Por lo anterior, dijo que pugnan para que el Ejecutivo estatal o ellos, sí se les da la posibilidad jurídica promuevan una reforma de la Ley de servidores públicos, “ellos son los culpables”, por lo que insistió en la necesidad de crean una intención jurídica a esta norma para que regule a estos trabajadores, también conocidos como de confianza, y así poner un punto final a “tanta tropelía”, explicó.

  

En el mismo sentido explicó que piden esto en lugar de que se trate de afectar los logros laborales adquiridos por el Sindicato que representa, a favor de los trabajadores de base, debido a que con la recién aprobada reforma a la Ley del Servicio Civil se pretende que no se demanden bases y no se reciban salarios retroactivos, en caso de despido injustificado.

  

Sobre el primer punto, dijo que en la actualidad una persona puede demandar una base a seis meses de haber ingresado a laborar en una dependencia publica pero con la modificación que entrará en vigor después de su publicación, deberán esperan un año, con el riesgo de que sean despedidos un mes antes, dijo.

  

Asimismo, explicó que con la nueva ley pondrá un tope salarial, el cual no podrá rebasar los 12 meses en caso de que el sindicalizado sea despedido y se decida demandar, “estos pleitos pueden durar años”, por lo que también ve una ventaja por parte de la parte patronal, “se quieren hacer un chaleco a la medida”.