TIJUANA BC 2 DE OCTUBRE DE 2013 (AFN).- Los casi 6 mil reclusos del Centro de Reinserción Social (CERESO) de la Mesa, mejor conocido como “El Pueblito”,  presentan grandes diferencias sobre las que derivan del ala femenil donde residen 496 internas.

Es más común según se dijo, la reincidencia en ellos y son menos los que salen bajo fianza, quedando “abandonados” en las celdas, además de se involucran en más riñas entre compañeros y cometen crímenes más violentos. Todos estos factores los hacen ser considerados como “problemáticos" en comparación con las mujeres de la prisión.

El director de la penitenciaría de La Mesa, César Daniel Ramírez Acevedo, indicó que aunque en los últimos meses ha aumentado la reincidencia criminal en las  mujeres,  es equivalente a un 20 por ciento de la población total, mientras que en el ala varonil, se mantiene en un permanente 40 por ciento, según las estadísticas.

Dio a conocer que los principales delitos de ingreso de una mujer son: el robo en un 80 por ciento, delitos federales en un 10 por ciento y lo restante en homicidios y otros crímenes.

Reconoció que las cifras son parecidas a las de los hombres, sin embargo, el robo realizado por hombres es más violento, lo que conlleva a sentencias más altas a diferencia de las mujeres que explicó, roban con más “astucia” y sin armas.

Hizo saber que las sentencias en hombres oscilan entre los dos y cuatro años, mientras que en la sección femenina el promedio es de un año en la cárcel y añadió que aunado a una sentencia menor, las mujeres suelen salir bajo fianza y no cumplen su condena dentro de prisión, mientras que los varones se quedan ahí “abandonados” por sus familias.

Reiteró que la salida pronta de las mujeres tiene que ver con el papel que juegan dentro de la sociedad, ya que sus seres queridos se encargan de reunir dinero para sacar de la cárcel a las cabezas de familia que pueden ser madre, esposa, hija,  hermana, abuela o incluso tías.

Ramírez Acevedo declaró que las mujeres que se quedan a cumplir sentencia son porque cometieron delitos más graves y no alcanzan los beneficios.

Debido a la sobrepoblación que existe dentro de las celdas, indicó que los altercados más comunes en el ala varonil son las riñas y en la femenil se dan con frecuencia problemas de convivencia que son reportados a los oficiales, sin llegar a golpes.