Cuenta voces 
Por: Armando Lares.

TIJUANA BC 1 DE DICIEMBRE 2018.-Los mexicanos crecimos conociendo historias a través de la televisión, hay quienes aseguran que así era como el gobierno trataba de mantenernos controlados, durante muchos años las televisoras fueron parte de la política educativa nacional, su programación nos dominada en casa, mientras el gobierno hacía y deshacía. 

Uno de los métodos más efectivos de manipulación fueron las telenovelas, cada generación hoy recuerda al menos una de ellas, sus elencos estaban integrados por personas que no brillaban por su inteligencia sino por su linda cara.

Así es como se hicieron famosas, hasta convertirse en una estrategia política cuya cúspide encontraron en la telenovela que más ha hecho sufrir y llorar a los mexicanos, la que comenzó de manera contraria a todas las demás, su inicio fue felicidad pura y su final lo marcó la tragedia, sin duda me refiero a la novela más larga y costosa que ha sometido al pueblo de México; la de Enrique Peña Nieto. 

Su producción no fue nada fácil, llevo tiempo y costó bastantes millones, como ninguna otra, todo empezaba con una historia que lo difícil de contarse era el  convencer a los mexicanos, pues se centraba en el regreso del PRI a los pinos, y contarla de manera tradicional habría sido un rotundo fracasó.

El reto era mayúsculo así que se tenía que recurrir a la característica principal de las telenovelas; las caras bonitas y una historia de amor. 

El Estado de México lo gobernaba un político joven, en ese entonces bastante popular y por supuesto muy carismático, la producción encontró al protagonista perfecto.  

Y como en las telenovelas el romance es el elemento principal, hacía falta encontrarle a la pareja ideal, la trama tenía que tener a la dueña y esta llegó destilando amor, una mujer exitosa, sin pecado concebido, que de inmediato impactó como un huracán al joven político, así empezó el sueño de amor, que años después se convertiría en un dulce desafío. 

La historia inició en 2012, aunque el rodaje comenzó algunos años atrás, la atípica telenovela de inicio feliz, muy rápido pasó al sufrimiento, pues no había transcurrido ni un año, cuando la comunidad fronteriza recibió un impacto fatal, pues la reforma hacendaria aumentó el IVA del 11 al 16%, lo que provocó una serie de acciones y reacciones, un duro golpe para la frontera, este capítulo no fue de drama sino de terror, a muchos políticos se les acabo su carrera por apoyar esa decisión. Al cuestionar al titular de la SHCP sobre el impacto de esta reforma, su respuesta fue algo parecido a los ricos también lloran.

Esto sin olvidar el excesivo costo de las importaciones de vehículos y la depreciación del peso frente al dólar.

De ahí en adelante los capítulos no sugerían nada prometedor, un ejemplo fue la reforma energética, la madre del gasolinazo, que tuvo un episodio bastante tenso cuando ciudadanos inconformes bloquearon las terminales de Pemex en Mexicali y Playas de Rosarito, dejando sin suministro a varias gasolineras escaseando el combustible en todo el Estado, ante ello el mandatario mostró su corazón salvaje, ni siquiera se indignó.

En otros capítulos, vimos escenas tan tristes y dolorosas como; la desaparición de 43 estudiantes en Ayotzinapa, la masacre de Tlataya, el famoso socavón, la casa blanca, el caso Odebrecht, la fuga del chapo, la estafa maestra, la libertad de Caro Quintero, los gastos en publicidad de la SEP, la liberación de Elba Esther, la visita de Donald Trump, el chofer millonario de SEDESOL, los más de 130 mil muertos, los asesinatos de periodistas y defensores de DH, los feminicidios, la caravana migrante, la condecoración del yerno de Trump, entre otras. Todo esto marcado por la opacidad, la corrupción y la impunidad, el sello de la casa. 

A lo largo de estos seis años los mexicanos fuimos testigos de cómo un gobierno insensible, formado por funcionarios feroces nacidos en cuna de lobos, nunca quiso escuchar a la gente, se llevaron hasta las esperanzas, por ello pasaron de ser un proyecto prometedor a terminar siendo el gobierno muy cuestionado y repudiado, sus decisiones sepultaron al PRI, y le dieron el triunfo a un rebelde. Esta historia hoy llega a su fin y será recordada como la primer telenovela sin final feliz.

Lararium: A quienes festejan el TMEC, deberían preguntarle a los funcionarios americanos que opinan de los mexicanos, de lo complicado de la negociación y la firma del Tratado, su respuesta será; “la hoy famosa frase de Taibo II”.