Palco de Prensa
Por: Gilberto LAVENANT
Apenas en su primer año de gestión administrativa, ya es más que evidente, el gobernador panista, Francisco Arturo Vega de Lamadrid -le gusta que le llamen “Kiko”-, es “candil de la calle, oscuridad de la casa”.
No sólo porque prefirió invertir sus recursos personales en Baja California Sur, que crear fuentes de trabajo en la entidad que gobierna.
En junio pasado, logró que la Legislatura estatal -con dispensa de trámite, o sea vía “fast track”- le autorizara contraer un adeudo por 420 millones de pesos, a pagar durante los próximos 10 años, a razón de 42 millones de pesos anuales, para la creación del Centro de Rehabilitación Infantil Teletón (CRIT), operado por Televisa.
Ante la empresa televisiva, Kiko se mostró excesivamente generoso y complaciente. Dio la impresión, de que en Baja California lo que sobra es dinero.
Luego se sabría, que su manifiesta generosidad, era simple “plan con maña”. Quería congraciarse con Televisa, para sus posibles proyectos políticos futuros.
Esta semana, en base a dos casos concretos, se evidenció el lado negativo del gobernador. Insensible, agarrado o codo, sordo y ciego. Quedó claro, que lo carismático es solamente para las fotos.
El caso más grave, sin duda alguna. El presidente del Patronato de la Cruz Roja de Tijuana, Carlos Rubio Arreola, reveló que la institución afronta una aguda crisis económica.
Tan delicada es su situación, que fue necesario despedir a 16 empleados administrativos y socorristas y, aún así, requiere de cuando menos 3 millones de pesos, para operar durante lo que resta del presente año.
Lo absurdo es que, no obstante que se trata de una institución que otorga un enorme beneficio a la comunidad tijuanense, pues acude en apoyo de las personas accidentadas y las traslada a los centros hospitalarios, el gobierno estatal, no le ha brindado el apoyo que en años anteriores.
Kiko se comprometió a aportar 420 millones de pesos, de recursos públicos, para el CRIT de Televisa, pero no ha sido capaz de destinar 3 millones de pesos que requiere la Cruz Roja. Por ello lo de “candil de la calle, oscuridad de la casa”.
El directivo de la Benemérita Institución, manifestó que recibieron apoyo de parte del Sistema Educativo Estatal y de Recaudación de Rentas, pero no del gobernador, como en años anteriores. Al CRIT, aportó un millón de pesos, de su bolsa.
Esto se ha agravado, porque la economía en general, ha deteriorado la capacidad de donación de los tijuanenses. En especial, por los nocivos efectos de la Reforma Hacendaria, dentro de la que destaca el incremento de la tasa del IVA del 11% al 16%.
La situación se reflejó en una reducción de cuando menos 7 millones de pesos, con respecto a años anteriores.
En estos momentos, la Cruz Roja requiere de unos 5 millones de pesos, para seguir operando. Cuando menos 3 millones, con riesgo de disminuir los servicios.
El presidente de la Cruz Roja, ante el Grupo Madrugadores de Tijuana, manifestó que desde hace varias semanas, han estado solicitando una audiencia con el gobernador, para exponerle esta crítica situación, pero no han recibido respuesta.
Lógico, Kiko se la pasa volando. Pasa más tiempo en el aire, en un avión, obviamente, que en su oficina o atendiendo a los bajacalifornianos.
Lo disculpa, en cierta forma, pues dice que sabe que la prioridad de Kiko es el CRIT. No obstante, clama: “pero necesitamos más apoyo que nunca, ya que este año ha sido muy difícil”.
Para dar una idea clara de la importancia de la Cruz Roja, en Tijuana, indica que en los primeros nueve meses del presente año brindó 21 mil atenciones a quienes acuden a la institución, 29 mil servicios de ambulancia y unos 700 hospitalizados.
El otro caso. Este, en el ámbito cultural. Se trata del evento de Entijuanarte. En días pasados, se llevó a cabo la décima edición.
Los organizadores, mediante escrito, le comunicaron a Kiko Vega sobre el éxito obtenido. Pero a la vez, aprovecharon la ocasión para echarle en cara, que el gobierno estatal no les apoyó para nada.
Le dijeron que 7 meses después de que la Fundación Entijuanarte, le solicitó apoyo para esta nueva edición, el director del Instituto de Cultura, Manuel Bejarano Giacomán, les contestó, para decirles que ya no se les apoyaría.
El argumento, para tratar de justificar la negativa, es que ya estaban recibiendo recursos federales a través del Consejo Nacional Para la Cultura y las Artes y que por lo tanto, si el gobierno estatal les apoyara, sería una duplicidad de apoyos.
Total, el “carismático” Kiko Vega, tiene su lado oscuro, el poner oídos sordos a los reclamos sociales. En especial, en los casos en que tales solicitudes de apoyos, no le garantizan votos, para futuras elecciones.
Al Teletón, 420 millones de pesos. A la Cruz Roja de Tijuana, ni los 3 millones de pesos. A Entijuanarte, ni un peso. No hay duda alguna, Kiko es “candil de la calle, oscuridad de la casa”.
