Columnista de la SillaRota:  Jorge Rojas

 

En el marco del escándalo por las irregularidades en la Línea 12 denominada "Dorada", los ingresos extraordinarios a 100 días del aumento a la tarifa al Metro simplemente no dejan ver ninguna mejoría.

 

Los usuarios del Metro siguen batallando con retrasos en el recorrido, olor recurrente de frenos quemados, escaleras eléctricas fuera de servicio, y por supuesto los “vagoneros” en versión light que siguen apoderados de las rutas. Claro, a todo esto hay que aumentarle la inseguridad que crece en las estaciones donde los policías auxiliares lo único que hacen es pasearse para lucir sus nuevos uniformes.

 

La pregunta obligada ¿Donde están esos 881 millones de pesos? ¿Dónde está la lana?

 

A esos 881 millones de pesos hay que restarles las cortesías que generalmente no son superiores al 5% del volumen total, descuente al menos unos 30 millones de pesos a ese monto, de todas formas 850 millones es una cifra por demás llamativa.

 

La crisis de la Línea 12 sirve de alivio para Miguel Ángel Mancera y para Joel Ortega, quienes por el momento tienen zona de confort para echarle la bolita a Marcelo Ebrard para hacer carambola de tres bandas, pero ¿Dónde está la lana del aumento de dos pesos?.

 

Mientras millones de ciudadanos hacen malabares para sortear las inclemencias del servicio del Metro, pero sobre todo para balancear sus bolsillos porque aunque son dos pesos a mucha gente le afecta mucho este aumento en su economía familiar.

 

En honor y respeto a la economía de los ciudadanos el Jefe de Gobierno Miguel Ángel Mancera debe rendir cuentas puntuales del destino y buen uso de esos 881 millones de pesos, dinero excedente en las arcas de la administración del Metro.

 

Tal vez estimado lectores, estamos en la antesala de uno de los presuntos casos más graves de corrupción y desvío de recursos en los años recientes. La ruta de los millones perdidos del Metro tan sólo en 100 días obliga a un escrutinio público implacable para exigir cuentas claras.

 

Con estos ingresos millonarios extraordinarios, el Metro debe dar resultados claros, lleva 100 días y no pasa nada, mientras la cuenta sigue abonando los dos pesos del aumento sin que exista claridad respecto a ¿Dónde están esos 881 millones de pesos?

 

La proyección se realizó con base a datos estadísticos del portal de internet del Sistema de Transporte Colectivo METRO correspondientes a 2012, destacando que en los mismos reportes año con año se registran aumentos sustantivos en cuanto al flujo de pasajeros y por supuesto de ingresos monetarios, así que tal vez con las cifras de 2013 se tengan que sumar unos millones adicionales para ajustar la cifra.

 

Línea 12 de la Muerte

 

La corrupción, omisión y complicidad en la construcción de la Línea 12 involucra a Gobierno del DF, consorcio constructor formado por ICA, Grupo Carso y Alstom, el equipo certificador; en fin la lista de involucrados es larga.

 

De nuevo el nombre de Carlos Slim en la plaza pública de los señalados. El señor Slim ya dejo ver que los trenes no es lo suyo, quebró Ferrosur y ahora está involucrado en lo que pudo ser "El Tren de la Muerte".

 

Las empresas de Carlos Slim y el conglomerado ICA deben ser excluidos de las licitaciones para la construcción de trenes de pasajeros, las fallas en la Línea 12 son motivo suficiente para descalificar públicamente a estas empresas, aunque recurran a su legión de centuriones integrada por Senadores y Diputados para que cabildeen a su favor, la vida de los usuarios de transporte público no es un producto de cambalache de la tienda de abarrotes.

 

En la construcción de ferrocarril y trenes urbanos como el Metro deben participar empresas con probada capacidad y experiencia técnica en el ramo. De ese consorcio de Slim - Quintana, desconcierta la buena trayectoria que presentaba Alstom en el Metro de la ciudad de México.

 

El que se junta con villamelones siempre termina aporreado.

 

@mapaestrategico