¿Qué hacemos con el elefante de la habitación?
COLECTIVO SINDICAL Por: Lic. Érica López Amaya.
MEXICALI BC 21 DE NOVIEMBRE DE 2019.- La dignificación del trabajo en México tiene grandes retos; ya que las y los trabajadores del hogar cuentan con un régimen laboral distinto al que tienen el resto de los trabajadores. No solo en práctica si no en la misma Ley Federal de Trabajo, mucho tiene que desear nuestra ley sobre las garantías laborales de las trabajadoras de este gremio, ya que es una realidad que las trabajadoras; y me atrevo hablar en termino femenino por ser un sector representado en su mayoría por mujeres, estamos hablando que 2.4 millones de las personas que forman parte de este gremio un 90% es conformado por mujeres y 7 de cada 10 son de ascendencia indígena, cabe mencionar que casi un tercio de ellas son jefas de familia. Algunos datos que el Consejo Nacional para Prevenir La Discriminación nos brinda es que 8 de cada 10 trabajadoras del hogar carecen de acceso a servicios de salud y con ello no solamente son afectadas ellas, sino también sus familias, pues 8 de cada 10 no tienen pensión de retiro,7 de cada 10 no tienen ninguna prestación formal, y el 75% ganan menos de dos salarios mínimos por su labor, el 30% ganan menos de uno y 9 de cada 10 no tienen contrato por escrito.
Por otro lado, podemos observar otra de las injusticas que la misma ley marca se encuentra plasmado en el artículo 334 pues indica que: “Para los efectos de esta Ley, los alimentos y habitación se estimarán equivalentes al 50% del salario que se pague en efectivo”. Es decir que a las trabajadoras domésticas se les puede pagar menos que al resto de los trabajadores solo por el hecho de dormir y comer en la casa donde laboran; siendo este uno de los salarios que tiende a estar entre los más bajos del mercado laboral.
Urge que el Estado Mexicano ratifique el convenio 189 de la OIT en el cual, se exhorta a los estados miembros a implementar normas para proteger a las y los trabajadores domésticos contra el exceso de horas de trabajo, el descanso insuficiente y el pago inadecuado de las horas reales trabajadas. Esta importante tarea radica en proteger los derechos laborales de las trabajadoras domésticas, pues han pasado 8 años donde se hablaron de muchas promesas para este sector. Actualmente son 26 países quienes han ratificado el convenio 189 entre ellos (República Dominicana, Chile, Colombia, Argentina y Brasil) los cuales han avanzado en el tema. En caso de México, los avances han sido a cuenta gotas.
Sin embargo, a inicios del presente año se logró lanzar un programa piloto de incorporación al seguro social #ProgramaPilotoIMSS, aunque se reconoce el avance, en este piloto sigue estando sujeto la voluntad de los jefes la incorporación a los servicios de salud. son muchas las expectativas y poca información respecto al lanzamiento de este programa; pues tras ocho meses de su lanzamiento la información respecto a los avances es casi nula.
Por su parte el pasado 9 de noviembre El Senado de la República solicitó al titular del Poder Ejecutivo Federal remitir el Convenio 189 de la Organización Internacional del Trabajo, referente al trabajo decente para las trabajadoras y los trabajadores domésticos para su ratificación, esperemos la respuesta del ejecutivo sea inmediata pues sin duda se necesita voluntad política; pues los Derechos sociales y laborales que históricamente se les ha negado a este gremio no deberían estar sometidos a los recursos. Ratificar el convenio 189 sería una oportunidad de transmitir un mensaje de avanece hacia la dignificación del trabajo doméstico en México, con ello estaríamos garantizando los derechos sociales y laborales a más de 2 millones de trabajadores.
Lic. Erica López Amaya
Coordinadora Estratégica de Sindicato UNO
Correo electrónico: [email protected]
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