TIJUANA BC 23 DE OCTUBRE DE 2025 (AFN).- El presbítero Alfonso Chee Fimbres, quien falleció ayer miércoles a la edad de 99 años, fue despedido este jueves en una Misa Exequial presidida por el por el obispo auxiliar Mario Nicolás Villanueva Arellano, en el Santuario de la Virgen de Guadalupe, ubicado en la Zona Centro.

El Padre Chee, nació en Mexicali en 1926, pero fue bautizado en Calexico; tenía más de 70 años ofreciendo su ministerio a Dios, dijeron. 

 Al término de la misa, el cuerpo del sacerdote, fue sepultado en el altar lateral de San José, dentro del santuario, último templo donde sirvió como vicario.

En la ceremonia lo acompañaron más de 200 sacerdotes, seminaristas y fieles. Entre los asistentes a la celebración eucarística también estuvieron las Misioneras de la Caridad de la Madre Teresa de Calcuta y de otras congregaciones de religiosas.

El sacerdote de padre chino y madre mexicana, se caracterizaba por su humildad y desprendimiento. Llegó a Tijuana desde niño, y fue consagrado sacerdote en 1953 en Roma, donde realizó sus estudios de teología.

Además, el presbítero fue formador de sacerdotes, obispos, entre los que destacan el actual obispo auxiliar Mario Villanueva; el presidente actual de los obispos de México, Ramón Castro; Sigifredo Noriega Barceló (Zacatecas), Jesús Herrera (Culiacán), Javier Chavolla (Toluca), Antonio González (Cd. Victoria), y cientos de padres de quien fue director espiritual y confesor. 

El Padre Chee fue un referente para los católicos, incluso a nivel internacional, aunque también demostró ser un hombre espiritual y bromista, quien siempre ofreció la misericordia a través de sus consejos y obras de caridad, como cuando daba alimentos o visitaba presos y enfermos, compartiendo de los bienes que recibía, pero que regalaba a las personas necesitadas.

Era asiduo visitante del Seminario Diocesano de Tijuana, a donde acudía para ofrecer pan dulce a los futuros presbíteros. 

El sacerdote, que era mariano de corazón, vivió sus últimos años en el Hospital del Prado, donde estuvo a cargo de sus cuidados por más de cuatro años la doctora Patrícia Aubanel, quien también en su momento atendió a la madre Santa Teresa de Calcuta, una mujer también cercana a Tijuana.

Al compartir esta información, apoyas a la prensa que necesitas
Comparte AFN