Mexico DF 23 de junio 2015 (La Silla Rota).-Rubén Oseguera González “El Menchito” es considerado el número dos en el liderazgo del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG)- sólo detrás de su padre Nemesio Oseguera Cervantes “El Mencho”- fue detenido por autoridades federales y trasladado a la Subprocuraduría Especializada en Investigación en Delincuencia Organizada (SEIDO) en la Ciudad de México.
 
Esta es la segunda ocasión en que es detenido “El Menchito”, la primera ocurrió el 30 de enero de 2014, se le investigó por compraventa de droga y por ordenar los homicidios de integrantes de grupos rivales. Al momento de su captura, “El Menchito” tenía en su poder $10 millones de pesos en billetes de $500 pesos y se ostentó como “narcomenudista”.
 
“El Menchito” o “El Junior” a sus 25 años era el presunto encargado del trasiego y la compra venta de droga procedente de Sudamérica. Señalado como el autor intelectual de asesinatos de personas que se negaban a colaborar con el CJNG, además operaba las extorsiones y el robo de combustible, entre otros delitos.
 
El hijo de “El Mencho” era el encargado de colocar los cercos de seguridad en los estados de Colima y Jalisco, para evitar el ingreso de células de organizaciones delictivas antagónicas y de fuerzas federales.
 
Durante el proceso penal en contra de “El Menchito”, trascendió que su padre “El Mencho”, contacto a las autoridades federales para proponerles un trato: intercambiarse por su hijo, que lo condenarán a él y que dejarán en libertad a su Rubén Oseguera Cervantes.
 
Fue consignado al penal del Altiplano y once meses después “El Menchito”, el 26 de diciembre obtuvo su libertad por falta de pruebas.
 
Para evitar traiciones y deslealtades, el CJNG trabaja con una estructura familiar, por eso los liderazgos recaen en personas cercanas a “El Mencho”, entre ellos su hijo “El Menchito” y sus cuñados Abigail y José González Valencia, alias “Los Cuinis”.
 
“El Mencho” es considerado como uno de los principales traficantes de metanfetaminas, las llamadas “drogas del futuro” porque no se requieren de grandes plantíos para su cultivo, los precursores químicos son relativamente sencillo de conseguir y al igual que la instalación de laboratorios clandestinos.