* Cadáver presentaba "Síndrome del niño maltratado"

* Lo maltrataban "para que se fuera haciendo hombrecito"

TIJUANA BC 7 DE ABRIL DE 2013 (AFN).- la madre y el padrastro de un bebé fallecido el pasado 4 de abril, fueron consignados por el crimen del menor, mismo que presentaba el "Síndrome del niño maltratado", y tenía huellas de maltratos y golpes antiguos y recientes, lo que sufría "para que se fuera haciendo hombrecito", según los testimonios de la pareja; esto de acuerdo con la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE).

La Subprocuraduría Contra la Delincuencia Organizada, a través de la Unidad Orgánica de Homicidios Dolosos, consignó ante un Juzgado Penal a los padres de un bebé de un año diez meses de edad, por el delito de homicidio calificado.

Los padres, quienes ya se encuentran en la Penitenciaría del Estado como probables responsables de homicidio calificado y omisión de cuidados son: el padrastro, Luis Alejandro Luke Cano, conocido con los alias "Luis Alejandro Loke Cano" y “El Vago”, de 18 años de edad, originario de San Diego, California; y la mamá, Karen Aleeza Flores Guízar, de 18, de Tijuana, Baja California.

El homicidio fue cometido el pasado 4 de abril del 2013, en el domicilio ubicado en la calle Anexa Laureles de la colonia Los Laureles, delegación Playas de Tijuana; en agravio de un infante de nombre Dilan Gustavo García Flores, en donde se pudo establecer como móvil del homicidio violencia intrafamiliar.

El jueves pasado se dio fe del cuerpo sin vida del infante, mismo que al realizarle una revisión minuciosa por parte del agente del Ministerio Público, así como de personal especializado de Servicios Periciales de la PGJE, se le apreciaban diversas lesiones antiguas así como recientes, presentando un cuadro de “síndrome del niño maltratado” por las múltiples lesiones.

Golpeó al bebé para ir por drogas

Refiere la PGJE que en el lugar de los hechos se encontraban el padrastro y la madre,  y que Luke Cano manifestó dedicarse al narcomenudeo, vendiendo mariguana, además de ser consumidor mariguana y "cristal", y que el día miércoles 3 de abril, aproximadamente a las 17:00 horas, su amasia y madre del menor  alimentó a su hijo y se retiró a trabajar en un bar de la Zona Norte denominado New York, dejando al menor a su cuidado.

El indiciado, después de unas horas de estar a cargo del menor, comenzó a sentirse desesperado por la falta de droga y trató de dormir al niño metiéndolo en una tina de plástico, siendo una bañera que improvisaron como cuna, y debido a que el infante  estaba muy inquieto y lloraba mucho, y no le hacía caso de dormirse, el hombre se descontroló y de manera violenta comenzó a jalonear y tomar del cuello a Dilan Gustavo, gritándole que se durmiera, ya que le urgía salir de la casa, siendo que estaba desesperado para drogarse con sus amigos.

Y como su hijastro seguía llorando y no se callaba, fue entonces que ya muy enojado y desesperado agarró un cinturón y le dio un cintarazo entre la cara y el cuello, lo que ocasionó que el menor comenzara a sangrar de la boca con el golpe.

Acto seguido agarró a su hijastro del cuello y lo aventó hacia la cuna improvisada, y estando boca abajo el menor continuó llorando, lo que provocó que este se bronco aspirara.

Luego, el ahora indiciado salió a la calle para drogarse, y al regresar encontró al menor convulsionándose y con los ojos en blanco; le echó agua para que reaccionara, pero al no lograrlo, lo llevó a la casa de unos vecinos quienes llamaron una ambulancia.

Paramédicos revisaron al infante informándoles que ya se encontraba sin vida, y ellos mismos se percataron de que el menor presentaba una serie de lesiones  a consecuencia de omisión de cuidados, característico del “síndrome del niño maltratado”, refiere el informe de la PGJE.

Constante maltrato

En la investigación se conoció que el menor era constantemente agredido a golpes por su propia madre y por su padrastro, hoy indiciados, lo que se corroboró con la fe ministerial de cadáver y con el certificado de necropsia, que presentaba lesiones antiguas y recientes, así como cicatrices.

La misma madre confesó, en los mismos términos que narró el padrastro, que el ahora indiciado maltrataba a su hijastro y que los golpes que le daban eran "para que se fuera haciendo hombrecito", porque a decir del padrastro el niño estaba muy chiqueado.

Asimismo, narra la indiciada que ella trabaja en un bar y que tenía tres semanas aproximadamente de irse a vivir en concubinato con su amasio, Luis Alejandro Luke, a quien le dejaba encargado por las noches a su hijo, hasta el día que este le llamó a su trabajo diciéndole que se regresara porque había un problema, y al llegar a su domicilio fue informada  de la muerte de su hijo a consecuencia de los golpes ocasionados por su amasio.

Por lo anteriormente el Representante Social determinó ejercitar acción penal en contra de Luke Cano por el delito de homicidio calificado, siendo internado en las instalaciones del Centro e Reinserción Social de La Mesa en Tijuana; asimismo se solicitó al Juez de Primera Instancia de lo Penal en turno  tenga a bien librar orden de aprehensión en contra de Flores Guizar por el delito de omisión de cuidados.