TIJUANA BC 16 DE NOVIEMBRE DE 2021 (AFN).- Felipe Sánchez Amézquita, el agente investigador de la Fiscalía General del Estado (FGE) asesinado esta mañana, fue parte de los 21 agentes policiacos detenidos en noviembre del 2008.
La mañana de este martes, el agente, adscrito a la Unidad Contra Robos en Tijuana, fue asesinado a balazos, presuntamente por sicarios que viajaban en al menos dos motocicletas, cuando circulaba en la colonia Los Álamos.
En noviembre del 2008, el entonces alcalde de Tijuana Jorge Ramos Hernández, cumplía su primer año al frente de la comuna, cuando un sorpresivo operativo militar detuvo a 19 agentes de la Policía Municipal, varios de ellos altos mandos.
El secretario de seguridad en ese tiempo era Alberto Capella Ibarra, y al frente de la dirección de Policía y Tránsito Municipal se encontraba Julián Leyzaola Pérez; entre los municipales detenidos estaban el comandante y el subdirector operativo, el jefe de la unidad de enlace y la jefa de grupos especiales, entre otros, hasta sumar 19.
De igual forma, entre los detenidos estaban dos agentes de la entonces Policía Ministerial, uno de ellos, Felipe Sánchez Amézquita; todos fueron arraigados en la Ciudad de México, acusados de operar, unos para el cártel Arellano Félix, y otros para Teodoro García Simental, “El Teo”, y Raydel López Uriarte, “El Muletas”.
Tras vencer el plazo constitucional del arraigo, a los agentes se les dictó auto de formal prisión, y su caso fue trasladado a un juzgado federal en Tepic, Nayarit.
Tras varios años de una pelea jurídica, en la que los oficiales denunciaron haber sido incomunicados y torturados en el cuartel militar en Tijuana, previo a su traslado al centro del país, finalmente la gran mayoría de los detenidos fueron recuperando su libertad con el paso de los años, tras una serie de recursos a su favor interpuestos por el abogado -ya fallecido- Rafael Flores Esquerro.
Al igual que Sánchez Amézquita, tras haber resultado absueltos, según se dijo por falta de pruebas y violaciones al debido proceso, varios de los agentes entablaron entonces una demanda para ser reincorporados a sus respectivas corporaciones.