Ciudad de México 9 de febrero de 2015 (lasillarota.com).- La Procuraduría General de la República calificó como "especulaciones" y comentarios "lejanos" a la realidad y sin "sustento" las afirmaciones del Equipo Argentino de Antropología Forense (EAFF), respecto a que el Ministerio Público Federal incurrió en imprecisiones en la recolección y procesamiento de pruebas en la investigación que se lleva a cabo por la desaparición de 43 normalistas de Ayotzinapa.

En un comunicado, la dependencia federal señaló la participación del equipo argentino se dio por el interés de los padres de los estudiantes aún cuando únicamente dominaban las disciplinas de antropología, criminalística y genética, por lo que los alcances del trabajo de peritos argentinos “en conocimiento de otros dictámenes no son válidos como expertos".

Por ello, la institución insistió en que no es válido que los argentinos busquen "sembrar la duda" de que en el basurero de Cocula no fueron ejecutados e incinerados los estudiantes.

La PGR hizo hincapié en que los especialistas "no son autoridad" en la investigación, por lo que su interés de que se les entregue la cadena de custodia de las pruebas recabadas "rebasa" las funciones que les fueron asignadas.

"La PGR les recuerda que la petición hecha de que les sea entregada la cadena de custodia de dicha diligencia, rebasa con creces su función de peritos habilitados".

Precisó que el EAAF fue notificado de la diligencia que se llevaría a cabo para la recuperación de las bolsas con restos óseos en el Río San Juan, sin embargo, no presenciaron la recuperación.

"La mañana del 29 de octubre de 2014, el EAAF decidió darle prioridad al basurero de Cocula y se dirigió a él, en lugar de al Río San Juan, aún cuando el vehículo que los transportaba tenía como primer arribo el Río, lugar al que llegó y descendió personal de la Procuraduría (incluyendo peritos) para realizar dicha diligencia", detalló.

Por ello, añade la institución que "esta Procuraduría actuó conforme a sus facultades y no acepta duda alguna en que la diligencia practicada y los indicios encontrados tienen validez jurídica dentro de la investigación, a pesar de no haber estado presente el EAAF", puntualizó.

Aclaró que respecto a la solicitud del equipo de peritos para participar en la diligencia del 15 de noviembre en las inmediaciones del basurero de Cocula, la dependencia mencionó que dado que el objetivo de la diligencia era la recolección de elementos balísticos, no era necesario que ellos estuvieran presentes.

Entre los integrantes del EAAF “no se encontraban acreditados peritos en materia de balística ni de ninguna otra disciplina que no fuera antropología, criminalística y genética”.

La Procuraduría General de la República recordó que se han realizado hasta el momento 487 peritajes, en 26 especialidades, sin que el EAAF participara en todos y cada uno de ellos por no corresponder a sus áreas de estudio acreditadas en la investigación.

"A pesar de ello, los dictámenes son válidos y sus opiniones respecto a otras disciplinas, parecerían más especulaciones que certezas".

La dependencia exhortó a los argentinos a que, en el ejercicio de su deber y responsabilidad adquirida dentro de la averiguación previa, aporten sus dictámenes dentro del expediente, que es donde se deben establecer los criterios científicos, basados en metodología rigurosa.

Aclaró que el levantamiento del resguardo del basurero de Cocula fue acordado entre los peritos de la PGR y los miembros del EAAF una vez que se habían concluido los peritajes “dado que se habían practicado en su totalidad las pruebas y no había mayores indicios que aportaran a la investigación, por tal razón, pudieron acceder al sitio medios de comunicación y familiares”.

No obstante, aclaró, “su petición de volverlo a resguardar, fue atendida y los días que no se contó con seguridad en el lugar, no representan ninguna afectación al resultado de la investigación", apuntó.

Recordó que quienes llegaron primero al basurero fueron los miembros del EAAF, y quien los recibió fue el procurador general de la República, Jesús Murillo Karam, dándoles en todo momento las facilidades para realizar su trabajo inmediatamente, incluyendo dos helicópteros permanentemente a su disposición.

La PGR aclaró que la aseveración  del equipo argentino respecto a que la PGR presentó conclusiones sobre la evidencia física recolectada en el basurero de Cocula, interpretándolas como perteneciente a un solo evento de fuego que habría ocurrido en la noche del 26 al 27 de septiembre de 2014, son imprecisas.

Indicó que en la conferencia de prensa del 27 de enero de 2015, se señaló que se encontraron tres zonas con ceniza dentro del basurero, haciéndose también la indicación del punto de origen del incendio e inclusive se señaló que el área principal de fuego abarcó 140 metros cuadrados en una superficie cercana a los 15 X 9 metros.

La PGR señaló que todos los exámenes indican que los elementos mostrados en la conferencia de prensa referida, y los que integran la investigación, fueron analizados y relacionados directamente con la temporalidad del evento criminal del 26 y 27 de septiembre de 2014, "y no es aceptable que ante el cúmulo de evidencias, peritajes, confesiones, declaraciones e inspecciones ministeriales, se pretenda sembrar la duda de que en ese lugar fueron ejecutadas e incineradas alrededor de 40 personas", esto mismo corroborado por los materiales y exámenes científicos practicados en dicho lugar por esta Procuraduría.

La PGR finalizó diciendo que en todo momento ha actuado con transparencia y profesionalismo, permitiendo que los familiares y sus representantes, así como el propio EAAF colaboren y tengan acceso a los 85 tomos y 13 anexos que comprenden la Investigación, y manifiesta que seguirán haciéndolo, porque lo que la procuraduría busca es que se haga justicia.