TIJUANA BC, 28 DE FEBRERO DE 2012 (AFN).- Las “famosas 72 horas” de espera para levantar la denuncia de una persona desaparecida, “son un mito”, así lo manifestó Miguel Ángel Guerrero Castro, coordinador estatal de la Subprocuraduría contra la Delincuencia Organizada.
“Las famosas 72 horas son un mito que se maneja; nunca hay que esperar 72 horas ni mucho menos para reportar” a alguien desaparecido, afirmó el funcionario estatal.
Asimismo refirió que el Centro de Apoyo a Personas Extraviadas y Ausentes (CAPEA) trabaja de manera coordinada las 24 horas del día con la sub procuraduría de zona, en el área de la unidad orgánica de lesiones, así como los agentes periféricos de las delegaciones de La Mesa, Otay y Mariano Matamoros.
Lo anterior dijo, con el objetivo de que se levanten de manera inmediata los reportes de personas extraviadas y ausentes.
Una vez que se valora la dimensión del caso la jefatura del grupo CAPEA así como un agente de guardia, siempre se avocan inmediatamente al lugar en apoyo con la comandancia para tratar los asuntos, afirmó Guerrero Castro.
De igual forma recordó el caso de la menor Itzel de 17 años desaparecida el día jueves 9 del presente mes y unos días después fue localizado su cuerpo desmembrado dentro de una alcantarilla.
En relación al caso, manifestó que se atendió a los familiares que levantaron el reporte en una unidad de la periferia pero se avocaron en la investigación. Desafortunadamente dijo, la menor falleció, pero el resultado del caso fue que se detuvo a una persona responsable a la que se le ejercitó acción penal.
Miguel Ángel Guerrero Castro fue entrevistado esta mañana durante el evento “Retos y Logros del Centro de Apoyo a Personas Extraviadas o Ausentes” realizado en la ciudad de Tijuana.
El objetivo fue dar a conocer los retos y logros por parte de CAPEA, dar a conocer las actividades que realiza así como concientizar a las familias sobre algunos de las principales causas del extravío o la ausencia de menores y adultos mayores principalmente.
Lamentablemente dijo, actualmente se ha dado la incursión de menores desaparecidos en la delincuencia organizada, donde se han presentado algunos desenlaces fatales ya que son encontrados, sin vida.
“Muchas veces las mismas cuestiones de separación –de los padres de familia- desintegración de la familia, influyen a que estos menores sean atraídos por la delincuencia organizada; además de la responsabilidad de los mismos jóvenes que son atraídos por el dinero fácil y la falta de estudios”, refirió.
Por lo que el coordinador estatal hizo un llamado a los padres de familia para que pongan un poco más de atención en sus hijos.