MÉXICO, DF 25 DE FEBRERO DE 2012 (Kaleydoscopio.com).- Es común quejarse del ruido, más cuando se vive en una ciudad y cerca de los centros de acción de las urbes, pero en el otro lado de la moneda millones de personas sufren porque no pueden oír. La Organización Mundial de la Salud (OMS) cuenta que entre uno y dos de cada 1,000 de los recién nacidos en el planeta son sordos profundos o severos.
Los datos de la ONU indican que en el mundo había 250 millones de personas con discapacidad auditiva hasta el año 2001 y de acuerdo con el XIII Censo General de Población y Vivienda 2010 en México existen 498,640 personas sordas: 273,216 hombres y 225,424 mujeres.
La OMS menciona entre los factores de riesgo asociados con la sordera las infecciones del oído, enfermedades infecciosas, uso de medicamentos ototóxicos y exposición a ruidos excesivos.
Según datos del Inegi, más de la mitad de la población mexicana sorda no asiste a la escuela, y 90% de los niños sordos nace en familias con padres oyentes.
La mayoría de los padres oyentes no aprende lengua de señas a un nivel suficiente como para consolidar un vínculo comunicativo-afectivo con sus hijos sordos.