Capella "a la cueva del lobo"
Agencia Fronteriza de Noticias
Translate this website into your desired language:

Capella "a la cueva del lobo"

Cuernavaca Morelos - jueves 9 de enero de 2014 - AFN .
4392
*.- Morelos, en los 10 primeros lugares a nivel nacional en todos los delitos
*.- No le permiten la entrada a las oficinas de Seguridad Pública 
*.- Trabajarán para reducir en un 70% el tema de los secuestros en 90 días
*.- Francisco Javier Viruete y Miguel Angel Marín lo acompañan en esta experiencia
 
DORA ELENA CORTÉS 
 
CUERNAVACA MORELOS 9 DE ENERODE  2014 (AFN).- Tras concluir su período como Secretario de Seguridad Pública de Tijuana, el abogado Jesús Alberto Capella Ibarra tenía la idea de realizar una actividad “un poquito más relajada”, sin embargo ante la propuesta de atender lo que definió como un “reto inédito” terminó metiéndose a la “cueva del lobo”, al aceptar en principio convertirse en encargado de la oficina de Seguridad Pública en el estado de Morelos, lo que lo convierte de manera inminente, en el titular de la Secretaría en esta entidad y en “cabeza” del llamado “Mando Único”.  
 
Morelos está considerado hoy en día como uno de los estados más violentos del país, ya que ahí han operado diversos grupos del narcotráfico y hasta hace poco era asiento de cabecillas de las mismas bandas criminales. En todos los delitos que más conmueven a la sociedad, la entidad se ubica entre los 10 primeros lugares, destacando actualmente el secuestro y apenas hace unas semanas el gobernador de la entidad Graco Ramírez Garrido Abreu fue amenazado por el crimen organizado.
 
Por otra parte y apenas a unos días de que el funcionario tomó posesión y cuando se encuentra en plena reorganización del trabajo interno que se hace en esa Secretaría, un grupo de sicarios acabó este jueves con cuatro integrantes de una familia en la comunidad indígena de Xoxocotla, ubicada en el municipio de Puente de Ixtla, en un franco reto a todas las autoridades.
 
Los homicidas ejecutaron a sus víctimas dentro de su humilde vivienda en la colonia “Los Juanes”, donde se encontraban dos hombres y dos mujeres, todos adultos, en tanto que los menores de edad que estaban en el mismo sitio, resultaron ilesos. Las policías y el ejército llegaron al lugar de los hechos, una hora después de cometida la sangrienta ejecución.
 
En entrevista exclusiva con AGENCIA FRONTERIZA DE NOTICIAS (AFN), el nuevo funcionario morelense adelantó que en este momento la prioridad número uno para el gobierno del perredista Ramírez Garrido, es reducir y finalmente abatir el delito de secuestro que está lacerando a la población de esta entidad, en donde tan sólo el año pasado se registraron 158 hechos criminales de esta naturaleza. A la par se realizarán acciones para combatir los delitos de “alto impacto” como las ejecuciones. 
 
Capella Ibarra manejará una fuerza policíaca de 700 elementos, aunque se anuncia que para este año se integrarán 300 más; un presupuesto de 433 millones de pesos, cifra que está muy por debajo de los 1,000 millones que se manejan en la Secretaría Seguridad Pública de Tijuana, que encabezó hasta noviembre del año que concluyó. Y más adelante cuando se concrete el cambio constitucional  correspondiente, oficialmente será responsable del “Mando Único”, con lo que coordinará a las corporaciones municipales y del ejército.
 
El tijuanense sustituyó este lunes a la maestra en criminalística Alicia Vázquez Luna, quien por su carácter difícil y su gesto siempre adusto, afirmaron varios, no logró establecer una buena relación con los sectores de la entidad, con empresarios y otros actores sociales, por lo que varios de éstos, incluidos representantes políticos exigían su salida, ya que el estado de Morelos continuaba situado en el primer lugar nacional en el delito de secuestro, en tanto que en el resto de los hechos criminales, se mantenía dentro de los 10 primeros lugares ya señalados.
 
Por esto, según se dijo, el gobernador pensó en la posibilidad de hacer un cambio e invitar a Capella, ya que estaba enterado de la labor realizada por el tijuanense, además de que había sectores como el empresarial, convencidos de la capacidad del mismo, para ayudarles en sus propósitos de devolverle al estado de Morelos la seguridad en esta materia.
 
Ante esta situación, Graco Ramírez se dio a la tarea de localizarlo y de invitarlo a sumarse a los esfuerzos que llevan a cabo en la entidad, sin embargo se encontraron con el hecho de que un requisito dentro la ley impedía al tijuanense tomar el cargo de Secretario de Seguridad Pública del Estado, por no cumplir con el tiempo mínimo de residencia en este lugar.
 
No obstante eso, el gobernador convencido de la necesidad de llevar a Capella a su gabinete, revelaron, se reunió con sus asesores y finalmente decidió nombrar en principio al tijuanense como encargado de despacho, en tanto se modifica la legislación local en ese apartado, a fin de que pueda convertirse de manera oficial en el Secretario del ramo y cabeza del Mando Único.
 
En la entrevista Capella Ibarra adelantó sus planes y estableció que así como pretende reducir en breve la incidencia del delito de secuestro, también trabajará de manera simultánea por combatir los otros delitos del orden común que se registran en esta entidad con 33 municipios. Para esto ya tuvo un primer encuentro con los “mandos” de la Secretaría de Seguridad y de su policía estatal, a los que advirtió que no habrá pretextos para no empezar a dar resultados y lograr la detención de quienes perturban la paz pública en el estado Morelos.
 
Cuestionado sobre el porqué de su decisión de tomar esta posición en un estado donde existe un alto índice de inseguridad y donde han ejecutado a jefes policiacos, Capella reconoció que: “Yo traía la idea de tener una actividad un poquito más relajada, pero cuando me dicen que éste (el caso de Morelos) es un tema inédito para el país, que particularmente la situación de secuestro es sumamente grave  y que es la primera entidad que maneja el tema del Mando Único y no está dando los resultado que quisieran, pues me plantean un reto probablemente inédito  en la historia de toda la seguridad pública del país  para una entidad, y es como tomo la decisión de decir: éstos son los retos que de alguna forma pueden marcar la diferencia y demostrar que sí es posible revertir una serie de paradigmas  en donde se plantea una imposibilidad;  eso fue lo que nos motivó…lo que nos atrajo aquí a Morelos”.
 
Reconoció que ya había una expectativa de asumir una responsabilidad dentro de  la Subsecretaria de Participación Ciudadana y Prevención del Delito de la Secretaría de Gobernación en el país, lo cual confirmó posteriormente a AFN, el propio gobernador del estado Graco Ramírez, sin embargo el reto de la tarea en Morelos, le convenció más, ya que también, según dijo, la labor que se tiene que hacer aquí está más próxima a lo que ha venido realizando hasta el momento y beneficia a miles de familias de una entidad que está sufriendo.
 
Dijo que “Me queda claro que no es fácil; me queda claro que hay muchos intereses; me queda claro que es enorme la cantidad de paradigmas que hay que retar de la gente que está”. Sin embargo afirmó tener la confianza de que “vamos a aportar  y vamos hacer una reforma importante; yo siempre he dicho que el 80% del tema de seguridad depende de la población”.
 
Aceptó que todos los mensajes que hasta el momento ha recibido son en el sentido de que “hay que cuidarse” por lo que ocurre en Morelos: “Yo sé lo que hay inmerso en una responsabilidad de esta naturaleza y hay que encomendarse a Dios y tener los ojos muy abiertos; estar alertas y tomar las providencias necesarias  para la seguridad de las personas y de la gente que me va a acompañar en este proceso y tener la capacidad de reaccionar”.
 
Luego agregó que en este momento el objetivo fundamental, el “target” o el “blanco” donde debe estar ubicada la actividad de las fuerzas policiacas a su cargo, es en el tema de los secuestros “Y eso es lo que vamos a hacer”.
 
Al hablar de este fenómeno, Alberto Capella recordó lo que Tijuana vivió en este sentido, así como  de la lucha que dio, primero como activista social y después como responsable de la seguridad y aceptó que éste “es un tema que sí me molesta, obviamente por el daño tan grande en el ánimo, no solamente en la victima sino en su familias; es un delito único”.
 
Tijuana vivió esos ambientes, recordó el abogado: “Olvídate  tú de las ejecuciones: el secuestro, además de la cantidad de casos que se cometían, estaba el daño tan fuerte
que generaba en las familias. Es un tema bastante sensible para mí; lo entiendo… es un tema complicado para los morelenses; es Morelos una entidad donde por muchos años se han manejado circunstancias de esa naturaleza; se desbordó el año pasado; tiene que ver con cuestiones institucionales, en el Mando Único que se ha manejado; quiero concentrar las baterías… las energías en ese proceso”.
 
Sobre los 158 casos de secuestro denunciados el año pasado, Capella reveló que se siente con una clara preocupación de que hay que dar resultados rápido, pero además confió que: “Me siento tranquilo, halagado de haber, en un periodo tan corto de cinco semanas o menos, terminado una responsabilidad tan grande como Tijuana y haber asumida otra”.
 
Dejando a un lado este tema, el entrevistado dijo que hay otros delitos que deben de combatir, porque también han elevado su incidencia, señalando el robo con violencia “Y me sorprendió el tema de la violación, que también es grave; los robos en otras modalidades, particularmente el de los vehículos”.
 
Y específicamente señaló, hay otros delitos que le están pegando duro a la sociedad morelense, ya que van “de la mano” con la “industria del miedo”. Se trata de las extorsiones virtuales que se hacen a través de la vía telefónica y de los delitos cometidos por quienes pretenden “cobrar piso”.
 
Sobre el “Mando Único”, Capella dijo que está enfrentando dificultades por la ausencia de colaboración contundente de parte de algunos de los municipios y sus alcaldes, por lo que dijo que como cabeza de esta nueva figura va tener la responsabilidad de que ese Mando tenga los efectos que se espera, lo cual es otra de sus principales prioridades.
 
Reconoció que para que funcione bien dicho Mando, hay cuestiones políticas “inmensas”, que se deben resolver, como es el caso de las relaciones entre alcaldes y gobernador, además de las situaciones financieras o presupuestales, de equipamiento, de orden, disciplina, así como de mecanismos de diferencia de ejercicios de una policía estatal a una municipal, y otras.
 
No le permiten ingresar al edificio de seguridad
 
Sin embargo para poder dar solución a los problemas que enfrenta Morelos, Capella dijo que lo primero es “agarrar el control de todo esto y dio respuesta a lo que en el mismo día de su toma posesión sucedió, cuando elementos policiacos encargados de la puerta de ingreso, no le permitían la entrada al edificio seguridad y no lo hicieron hasta que no hablaron con la ya ex Secretaria, quien pese a que minutos antes se había dado la toma posesión ante el gobernador, continuaba posesionada  de la silla del titular y no había dado instrucciones a su personal para que atendiera al nuevo responsable del área.
 
Interrogado al respecto, Capella reconoció que se dio ese hecho y dijo: “Es cómico  que al llegar no me querían dejar entrar”. Luego se encontró con que no había luz en el inmenso inmueble de seguridad, por lo que adelantó que primero hay que empezar con lo básico, que es el  tomar el control de las instalaciones, establecer los mecanismo de comunicación y atender todo lo inmediato, lo que calculó que va a tardar por lo menos una semana.
 
“Mientras tanto, como dije hace unas horas; a este este carro se le van a cambiar las llantas y si no pueden  hay que cambiarlas y en ese proceso de avance estamos en estos momentos. Anunció que tendría su primera reunión de mandos, la cual se dio la misma tarde del lunes, en la que dijo que tendría que dar ciertas instrucciones muy claras y concretas de lo que se debe de hacer”.
 
Sobre la actitud adoptada por su antecesora, Capella no pudo evitar afirmar que lo ocurrido “es una mentada de madre” a los protocolos, al sentido de respeto institucional de quien se va de aquí, y luego dijo que de haber sido lo contrario, yo cubriría todos los escenarios; le pediría a mi particular estar atento a lo que estaba sucediendo, además de que hay cientos de personas trabajando aquí y les daría una instrucción: va a llegar fulano con su gente; hay que atenderlos”.
 
Capella Ibarra acudió el lunes pasado a las 11 del día a la “Casa Morelos”, donde despacha el ejecutivo estatal, para participar en la ceremonia oficial en la que fue nombrado como Encargado de Despacho de la Secretaría de Seguridad Pública del Estado. El gobernador lo puso inmediatamente a su lado izquierdo, junto con los otros funcionarios que recibieron nuevo nombramiento, en tanto que a su derecha ubicó a quienes se iban de su administración.
 
Con el malestar abiertamente reflejado en su rostro aparecía la maestra Alicia Vázquez Luna, de quien se dijo que el Secretario de Gobernación la invitó a sumarse dentro de una asesoría, de lo de lo que es el nuevo Sistema de Justicia Penal. A ella como al resto de los despedidos, se le notificó que minutos después, el Secretario General del Gobierno de Morelos presentaría ante los empleados de las respectivas oficinas y de manera oficial, a los nuevos titulares. 
 
Vázquez Luna abandonó la “Casa Gobierno” ignorada por los medios y se dirigió a las oficinas que durante un año ocupó y para allá también se trasladó el nuevo Secretario, Alberto Capella, después de que pudo concluir la entrevista de “banqueta”, con un enjambre de reporteros que interceptaron su salida y lo rodearon para dispararle una gran cantidad preguntas. 
 
En la ceremonia de cambio de funcionarios participaron poco más de medio centenar de representantes de medios de difusión de esta entidad.
 
Ya dentro del recién inaugurado edificio de seguridad pública que se encuentra en las inmediaciones de la ciudad de Cuernavaca y en un sitio estratégico que le permite trasladarse a los cuatro puntos cardinales del estado de Morelos, Capella Ibarra se encontró con que no funcionaban los elevadores, por lo que tuvo que tomar las escaleras para llegar hasta sus oficinas en el cuarto piso.
 
Pero eso no molestó al nuevo funcionario, sino el hecho de que solamente una tercera parte del edificio contaba con energía eléctrica, ya que “la luz se fue desde el sábado y la CFE informa que tardarán todavía una hora en suministrarle energía eléctrica”, según le notificó la administradora del edificio, alrededor de las dos de la tarde de ese mismo lunes. 
 
La funcionaria escuchó la orden tajante del nuevo secretario, en el sentido de que en una hora más deberían tener luz en todo el edificio, ya que la planta de emergencia no estaba funcionando “porque se nos acabó el diesel”. Una Secretaría con un trabajo tan sensible para hacer, como es ésta: “No puede dejar de trabajar ni un minuto” advirtió el funcionario.
 
Ya por la noche -y con luz en el edificio- Alberto Capella tuvo su primera reunión con los “mandos”, donde fue acompañado por dos de sus dos colaboradores que le dieron resultados en Tijuana: Francisco Javier Viruete, quien fue su Director de Policía y Miguel Ángel Marín Martínez, director de Inteligencia.
 
En esa reunión los encargados de cada una de las zonas de la Policía Estatal Acreditable, en que está dividido el Estado Morelos, así como personal médico y de inteligencia, escucharon con alivio que “a todos los estoy ratificando en este momento”, pero luego el despertar a la nueva realidad: “En 30 días deberán demostrarme que no fue equivocada esa ratificación”.
 
Después de decirles que en él encontrarían a alguien que les apoyaría para realizar su trabajo y para mejorar sus condiciones de vida, y de advertirles que de lo contrario los cesaría de su empleo, daría de baja y procesaría penalmente a quienes traicionaran a la corporación y a la sociedad que confía en ellos, Capella Ibarra les informó que no les impondría a sus “mandos” sino que tendrían la facultad para nombrarlos y para tomar decisiones en sus respectivas áreas, pero sentenció que de equivocarse o de no dar los resultados que se esperan “ustedes serán los responsables ante mí y tendrán que sufrir las consecuencias de esto”.
 
Además reclamó que no podía ser posible que se les estuvieran yendo los delincuentes, por diversas causas, incluida la del hecho “de no haber ocurrido en mi jurisdicción”, por lo que advirtió que aquel al que se le vuelva a ir un delincuente, lo cesaría de inmediato. Concluida la reunión, los policías estatales lograron detener a un influyente ebrio que en estado de ebriedad disparó dentro de un establecimiento donde vendían “Roscas de Reyes”, lesionando en la cara a un menor de cuatro años de edad que afortunadamente logró salvar la vida, y luego a unos hombres que pretendieron “ejecutar un levantón” de manera violenta.  
 
A sus “mandos” les fijó metas: reducir hasta en un 70%, en 90 días, el tema de los secuestros que afecta particularmente a integrantes de la llamada clase media, entre quienes se encuentran profesionistas y pequeños y medianos comerciantes.
 
Capella Ibarra dijo a AFN que durante el mes de marzo del año pasado tuvo su primer acercamiento con quien ahora es su jefe, ya que platicó con él durante una reunión que sostuvo con empresarios de Cuernavaca, quienes lo invitaron para platicar sobre el tema de seguridad pública.
 
“Me tocó saludar meses después al gobernador y me llamó mucho la atención, la enorme disposición que tenía siempre, de tocar, hablar y analizar el tema de seguridad pública. Terminamos nuestro encargo el 30 de noviembre en la ciudad de Tijuana; yo descansé el día primero y el 2 (diciembre) yo ya estaba en Toluca  con la alcaldesa de esa ciudad, tratando de atender el tema,  y en ese de diciembre  recibí una llamada de un amigo de la Ciudad de México  diciéndome que atendiera al gobernador de Morelos.
Tenía yo algunas citas en algunos otros municipios  del centro del país  y había ya una expectativa de asumir una responsabilidad en la subsecretaria de Participación Ciudadana y Prevención del Delito de la SEGOB. Entonces básicamente  lo que me faltaba era definir el tiempo y la fecha  de asumir esa responsabilidad. El caso es que platiqué con el señor gobernador; él me pidió que fuera su Consejero de Seguridad  en virtud de que era difícil asumir el tema del mando  en cuestiones de carácter legal.
 
Eso fue un jueves  4 de diciembre; el domingo siguiente recibí otra  llamada de él, donde me dice: Cambié de opinión, necesito que me tomes el mando en Morelos. Tuve otra conversación otros días después. Me mandaron una serie de información, hablé con el Secretario de Gobierno, hablé con algunas autoridades federales  del tema de Morelos, y empecé a analizar esa posibilidad. El planteamiento era muy claro y probablemente me encontraron un poquito el talón de Aquiles”.  
 
Capella se mostró entusiasmado, ya que dijo haber llegado con un buen nivel de aceptación ciudadana y con un apoyo irrestricto del gobierno Federal, lo cual consideró que es también un reconocimiento “para mi jefe y gran amigo Carlos Bustamante,  en cuanto a los resultados y la labor que realizó para seguridad pública”. 
 
Sin embargo dijo: “Me queda claro que es enorme la cantidad de paradigmas que hay que retar de la gente que está, las personas que están particularmente en esta Secretaria  atendiendo el tema  y estoy seguro de que vamos aportar  y vamos hacer una reforma importante. Yo siempre he dicho que el 80% del tema de seguridad depende de la población”.
 
Dijo estar confiado en que al igual que sucedió en Tijuana con Carlos Bustamante, aquí tendrá todo el apoyo del gobernador Graco Ramírez con quien aseguró que comparte una experiencia personal en sus trayectorias, ya que ambos han realizado activismo social y la búsqueda de la paz y la tranquilidad para sus respectivas regiones desde la parte ciudadana.
 
El entrevistado dijo que la inseguridad que se vive en Morelos es un inconveniente para los tres órdenes de gobierno y a todo mundo le afecta, ya que provoca la ausencia inversión privada en sus ciudades, por lo que nadie se puede sustraer de su responsabilidad de participar en esta lucha. Por esto rechazó que vaya a existir una objeción por parte de los alcaldes de sumarse al combate a la latente inseguridad, ya que esto “sería irresponsable y poco ético, inclusive hasta inmoral”. En su caso aseguró que “la única estrellita que se va cuidar aquí, es la que le toque al señor Gobernador, y el apoyo del gobierno”. 
 
Sobre las limitaciones o problemas que enfrenta en su nuevo cargo explicó que hay “complicaciones de carácter humano; de carácter presupuestal. Problemas de equipamiento, pero también la situación geográfica del estado  conurbado por todos lados, con estados complicados por todos lados y obviamente eso es un problema”.
 
En Tijuana recordó que en ese aspecto: Hacia el Oeste teníamos el mar y hacia el Norte tenia Estados Unidos. Por lo menos había una línea en un cuadro donde había que atender dos líneas nada más. La entrada de Rosarito y la entrada de Tecate. Aquí no. Eso es una complicación y aparte la posibilidad y la capacidad de huir rápido del estado cuando se cometen fechorías aquí”. Por lo tanto anunció que va a revisar esa parte: Vamos a crear una estrategia que va a tener la misma mística de Carlos Bustamante con la policía municipal. Voy a pedir a Graco Ramírez que me permita bajo su liderazgo, instrumentar  aquí, y ahorita, dicha estrategia. 
 
A la pregunta de que si Graco Ramírez le impuso condiciones al momento de nombrarlo Secretario de Seguridad Pública, Alberto Capella respondió: “Me puso cuestiones muy claras y concretas de lo que había qué hacer; entonces yo no hice promesas al aire de lo que se debe realizar. Sé que hay un campo fuerte para poder construir muchas cosas y en eso me pondré a trabajar. Yo calculo que vamos a estar platicando en situaciones diferentes, en  un periodo de seis meses.
Horacio Programa
Tijuana Limpia
Familias de Corazon
La favorita
Tecnico Electricista
La Marina solicita apoyo
Matemáticas Fáciles
AFN Marketing
Buscador Acerca de AFN Ventas y Contacto Reportero Ciudadano