La migración es un fenómeno que involucra a millones de personas, son incontables las que abandonan sus lugares de origen para sobrevivir a conflictos o labrarse un mejor futuro. La ONU indica que el número de migrantes internacionales ha aumentado desde unos 175 millones en 2000 a 232 millones de personas en la actualidad.
De acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas, la migración está ahora distribuida de una forma más amplia en más continentes; los diez primeros países de destino reciben una porción más reducida del total de migrantes que en el año 2000.
Algunos datos del fenómeno:
49% de los migrantes a nivel mundial son mujeres.
Uno de cada diez migrantes tiene menos de 15 años.
El impacto del flujo de remesas es también significativo y alcanzó 401,000 millones de dólares el pasado año, casi cuatro veces más que los 126,000 millones de asistencia oficial al desarrollo.
Los migrantes internacionales proceden de familias de clase media ya que los más pobres no cuentan con los recursos económicos.
La migración internacional resulta positiva tanto para el país de origen como para el de acogida. Sus beneficios potenciales son mayores que los de la liberalización del comercio internacional, especialmente para los países en desarrollo.
La mayoría de los migrantes complementa las capacidades de los trabajadores locales en lugar de competir con ellos.