CIUDAD DE MÉXICO 29 DE SEPTIEMBRE DE 2025 (AGENCIA MÉXICO).- El mundo del automovilismo se ha teñido de luto tras el emotivo anuncio de Lewis Hamilton, siete veces campeón mundial de Fórmula 1 y actual piloto de Ferrari, quien confirmó el fallecimiento de su inseparable bulldog Roscoe el domingo 28 de septiembre de 2025. El perro, que lo acompañó durante más de una década en circuitos alrededor del mundo, murió en los brazos del piloto británico a las 9:20 p.m., tras una intensa batalla contra una neumonía severa que conmovió a millones de seguidores.

Roscoe, un bulldog inglés de 12 años y vegano como su dueño, era mucho más que una mascota para Hamilton. Adoptado en 2013, se convirtió en una figura icónica del paddock de la Fórmula 1, viajando a Grandes Premios, posando en campañas publicitarias y brillando en redes sociales, donde su cuenta de Instagram (@roscoelovescoco) acumula más de 1.3 millones de seguidores. Su carisma y cercanía con el piloto lo transformaron en una celebridad por derecho propio, simbolizando ternura en un entorno de alta velocidad y presión.

La enfermedad golpeó con fuerza: días antes de su partida, Roscoe presentó dificultades respiratorias por una neumonía recurrente, lo que llevó a su ingreso en un hospital veterinario. Fue sedado para exámenes, pero sufrió un paro cardíaco que lo dejó en coma, conectado a un respirador artificial durante cuatro días. Hamilton suspendió un test de neumáticos de F1 el viernes 26 para velar junto a él.

“Lograron recuperar un latido y ahora está en coma. No sabemos si va a despertar de esto”, escribió Hamilton el 26 de septiembre, pidiendo a sus seguidores que mantuvieran a Roscoe en sus pensamientos. En esos días agonizantes, el piloto permaneció a su lado, priorizando este lazo sobre sus compromisos.

Finalmente, ante el deterioro irreversible, los veterinarios recomendaron la eutanasia como la opción más humana. “Después de cuatro días de soporte vital, luchando con cada poco de fuerza que tenía, tuve que tomar la decisión más difícil de mi vida y despedirme de Roscoe”, expresó Hamilton en su conmovedor tributo del 29 de septiembre. “Murió el domingo por la tarde, 28 de septiembre, en mis brazos. Nunca dejó de luchar, hasta el final. Me siento tan agradecido y honrado de haber compartido mi vida con un alma tan hermosa, un ángel y un verdadero amigo. Traer a Roscoe a mi vida fue la mejor decisión que he tomado, y siempre apreciaré los recuerdos que hemos creado juntos”.

Hamilton también reflexionó sobre el impacto emocional, aludiendo a la pérdida previa de su perra Coco en 2023: “Aunque perdí a Coco, nunca antes me había enfrentado a poner ‘a dormir’ a un perro, aunque sé que mi mamá y muchos amigos cercanos lo han hecho. Es una de las experiencias más dolorosas y siento una profunda conexión con todos los que han pasado por la pérdida de una querida mascota. Aunque fue tan difícil, tenerlo fue una de las partes más hermosas de la vida, amar tan profundamente y ser amado a cambio”.

Roscoe no solo fue un compañero fiel, sino un símbolo de resiliencia y ternura. En 2018, Hamilton reveló que su bulldog trabajaba como modelo publicitario, cobrando hasta 700 dólares por día en campañas en Los Ángeles, compitiendo con decenas de otros caninos en castings.

La partida de Roscoe ha desatado una ola de condolencias de colegas, equipos y aficionados. La FIA expresó: “La familia FIA está profundamente entristecida por la pérdida”, mientras ex-pilotos y miembros del paddock compartieron mensajes de apoyo en redes. Su legado trasciende lo físico: representa el vínculo profundo entre humanos y animales, el poder del amor incondicional y cómo un alma vegana y aventurera puede humanizar la élite del deporte motor. Roscoe forever, como tuiteó Hamilton: “Perdí a mi mejor amigo anoche. Gracias por el amor que le han mostrado todos estos años”.