El Cabildo de Mexicali tiene desde el 28 de julio sin celebrar sesión extraordinaria u ordinaria para desahogar pendientes.

 

En tres días se cumple un mes desde aquel lunes 28 de julio, que en sesión ordinaria se modificara el Reglamento Municipal de Transporte. En venganza, dijeron los afectados, el Alcalde Jaime Rafael Díaz Ochoa, corrió a personal del Ayuntamiento, escogió a los aliados políticos de los regidores que se conoce como el G-14.

 

En respuesta, los 14 ediles solicitaron sesión extraordinaria de Cabildo. Tras diferencias en cuanto al orden del día, el secretario del Ayuntamiento, José Félix Arango Pérez, convocó a Síndicos, Regidores y Alcalde a la asamblea para el 8 de agosto a las 19:00 horas.

 

La expectativa por saber el desenlance de la sesión extraordinaria sigue hasta la fecha. Ya pasaron 17 días desde que el Presidente Municipal se excusara por malestar estomacal. Ya se curó, así lo dijo en Miércoles Ciudadano, sin embargo sigue sin convocatoria.

 

Cada miércoles se le pregunta a Jaime Díaz, la fecha de la sesión del Cabildo, pero no da fecha.

 

Y dentro del Orden del día se encuentra el punto cuarto que se refiere a la ampliación presupuestal para realizar compras de material y equipamiento del H. Cuerpo de Bomberos de Mexicali.

 

Tampoco se ha instalado la mesa de trabajo para que a través del director del Sistema Municipal de Transporte, Rafael Morgan, se cite a los concesionarios del transporte público masivo, e iniciar el proceso de revisión de la petición de incremento a la tarifa.

 

Son siete puntos de los cuales no se han desahogado porque el Cabildo está paralizado por las diferencias entre el Alcalde y el G-14.

 

No hay luces de un arreglo, el tiempo que tuvo el Alcalde Jaime Díaz, no le sirvieron de nada. Ni pudo llegar a un acuerdo con los regidores de su propio Partido.

 

Jaime Díaz sigue en una posición autoritaria, coinciden las versiones de quienes han tratado con él, tanto regidores, síndicos como funcionarios de designación.

 

El Presidente Municipal no quiere que la Oficial Mayor, Maribel Aviléz, ofresca una disculpa.

 

“Nadie va a impedir que llegue al cielo”, es una frase utilizada del Alcalde de Mexicali hecha a los ediles en reuniones privadas.

 

No depone su postura, al contrario sigue “golpeando” a los rivales políticos.

 

El Alcalde de Mexicali sabe que con mayoría los ediles puede modificar el orden del día de cualquier sesión de Cabildo y realizar cambios a Reglamentos Municipales.

 

Jaime Díaz tuvo su tiempo para hacer una tregua pero no la hizo efectiva. Sigue corriendo la bola de nieve.