AFN POLÍTICO
Dora Elena Cortés
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TIJUANA BC 15 DE DICIEMBRE DE 2025 (AFN).- Como ya ha ocurrido en otras ocasiones y con otras administraciones, la Secretaría de Seguridad Pública de la ciudad anunció en fechas recientes, como todos ustedes saben, que con motivo de las fiestas decembrinas se ponía en marcha el operativo especial mediante el cual, agentes de la corporación policiaca estarían haciendo sobrevigilancia y dando apoyos especiales, para evitar que la ciudadanía sea objeto de robos y asaltos.
Y ese operativo incluye algo que en su momento fue muy novedoso, y que es el hecho de que en lo particular, uniformados de esa corporación pudiesen escoltar a aquellos empresarios pero también ciudadanos que necesitaran trasladar valores, ya sea en dinero en efectivo o cualquier otro bien, para que lleguen sin contratiempo, a sus destinos.
Pero ¿Qué pasa cuando son esos mismos uniformados los que abusando de su condición y en forma totalmente desleal, son quienes asaltan y roban a los propios ciudadanos?
Lamentablemente esa es una realidad, y no solo está pasando en estos momentos sino que ha ocurrido en gobiernos anteriores, al grado de que después de lo novedoso del apoyo ofrecido por la autoridad, los tijuanenses (en este caso) desconfiados, por lo que saben o temen que ocurrirá, rechazan -incluso- la protección personalizada, afirmando que si no los roban en ese momento, ya quedan señalados como personas con recursos, como para ser objeto hasta de un secuestro.
Y me consta que hay verdaderas intenciones de la Secretaría de Seguridad y de la propia autoridad municipal por mejorar la imagen de la corporación y además de dar resultados, recobrar la confianza ciudadana y combatir la corrupción.
Sin embargo, siempre hay elementos desleales y sin escrúpulos que siguen pensando que la placa es para amedrentar al ciudadano y se convierten en verdaderos delincuentes, solo que con credenciales para delinquir, echando por tierra las buenas intenciones, e inclusive, dañando de paso la imagen de sus compañeros que quieren hacer las cosas bien, porque como en todo, hay gente buena y hay gente mala.
En los últimos días se han conocido hechos que exhiben, de nueva cuenta, ese abuso policíaco que no sabemos a qué nivel dentro de los mandos llega, porque no puede ser que gran parte de la ciudadanía nos demos cuenta de los abusos y dentro de la corporación no.
Uno de los casos más recientes y más mediáticos fue el del dirigente de la llamada Patrulla Espiritual, Jesús Ignacio Osuna Torres ("El Chiquilín"), una organización civil que se dedica al apoyo de personas adictas a las drogas.
Él, según denunció, fue despojado de $1200 dólares, y a otro hombre -identificado como el mecánico- le quitaron $4000 pesos, los oficiales Carlos Arce Valenzuela y Mario Roca Gama, a los que denunció pública y oficialmente, por lo que fueron suspendidos por la sindicatura procuradora.
En redes, el tema se hizo tan viral, que fue motivo de infinidad de comentarios y hasta de bromas por parte de ciudadanos que, afirmaron no haber dormido en la noche en la que El Chiquilín lanzó un ultimátum, en el sentido de que habría de hacer en la mañana siguiente, fuertes revelaciones, si no se hacia justicia en su caso.
También el 9 de diciembre de este año, el activista y abogado Esteban Capella Ibarra denunció en redes que se estaba presentando lo que llamó "un patrón recurrente" en la actuación de algunos elementos de la policía local, afirmando que estaban abusando de automovilistas, particularmente de aquellos que tienen placas extranjeras en su vehículo.
Dijo que con énfasis, la atención suele dirigirse hacia conductores jóvenes a los que se intimida y amenaza con retirar el vehículo, extorsionando a estos con cantidades que van entre los 5,000 y los $25,000 pesos, para evitar el secuestro de la unidad.
Algunos de los que presentaron quejas dijeron que también fueron amenazados con "sembrarles" algo ilegal en caso de no acceder a sus peticiones económicas, con lo que se les intimida para que terminen cediendo.
Y nosotros tuvimos conocimiento, a fines de noviembre pasado, del caso de una persona que circulaba por la zona Centro de la ciudad, el pasado 21 de noviembre, cuando quien manejaba se equivocó al dar vuelta en la calle tercera, por una avenida llamada González Ortega, sin percatarse de que era sentido contrario, encontrándose de inmediato con elementos en una patrulla.
Afortunadamente no provocaron ningún accidente y reconocieron su falta, pero en lugar de proceder los elementos a levantarles la multa correspondiente les amenazaron con quitarles el vehículo y les presionaron, según denunciaron, con tal fuerza que les sacaron $1100 pesos, que uno de los patrulleros exigió que le entregaran, de tal manera que no se viera para que no los captara la cámara que estaba en la zona, frente a un restaurante que se llama Los Albañiles.
Al elemento que les exigió y les robó esa cantidad lo identificaron como "alto, moreno, pasado en kilos, de cabello quebrado y de unos 45 a 48 años.
Este es un S.O.S para que las autoridades en esa corporación se pongan las pilas.
ANA Y CONDA.- Estas diputadas morenistas de verdad que no niegan "la cruz de su parroquia". Y como son del "pueblo" (no sabemos de cuál), se agarraron como verduleras y se "rasgaron las medias".
PD.- Hubo jalones de greñas, cabezazos y patadas, para evitar que sus compañeras panistas y otros diputados de esa corriente ideológica tomaran la Tribuna en el Congreso Federal.
PD1.- Y es que son "tan leidas y escrebidas" que les dijeron que habrían de "discutir" el dictamen que da vida al nuevo órgano de Transparencia, que pensaron que discutir y desgreñarse son sinónimos.
PD2.- El motivo del enojo de los panistas fue que, previamente, se llegó a un acuerdo para que el nuevo Instituto de Transparencia fuese tripartita y los morenistas, como siempre, ignoraron olímpicamente lo antes pactado, para dejar las decisiones en un súper contralor
PD3.- ¡Qué bueno que llegamos todas! Por lo menos... para seguir dando espectáculos.
PD4.- Se acerca el fin de 2025 y por lo pronto... México sigue en pie...
PD5.- Hay que votar en 2027 por aquel que ofrezca resolver, en verdad, el problema del terrible tráfico que tenemos por toda la ciudad... Como mínimo.