*.- El "fiscarpio" de Baja California
*.- ¿Se "voltearon" diputados?
Dora Elena Cortés
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TIJUANA BC 19 DE ENERO DE 2022 (AFN).- Una nota publicada por el periódico El Universal, que aborda el caso del asesinato del compañero Margarito Martínez Esquivel, señala a Ángel Peña como comunicador; a Margarito como fotoperiodista, y a Sonia de Anda como activista. ¡Qué gran confusión!
Margarito sí está bien identificado, pero ni Peña es comunicador ni Sonia es activista, aunque en ocasiones sus apasionadas defensas caigan en este terreno, porque más que nada es periodista.
Pero la confusión la causan personas como Peña y Mariano Soto (ya muerto también, por asesinato), porque de la noche a la mañana, decidieron que podían ser periodistas y se asumieron como tales, al llevar por enfrente un teléfono celular y ponerse a pegar de gritos y hacer señalamientos a diestra y siniestra. No consideraron la obligación de fundamentar lo que manifestaban, a "ciencia y paciencia" de grupos de "facebuqueros"; algunos compañeros, y hasta (lo más grave), las autoridades.
Por eso, ahora es fácil leer cosas tan surrealistas como: "acusan a periodista de Tijuana de matar a otro periodista" o ver que espacios noticiosos tan importantes como el de Ciro Gómez Leyva, en Imagen, lo entrevisten, lo cual no está mal si así lo decide, pero lo aberrante es que lo hace, considerándolo un comunicador.
Estaba leyendo lo que hoy nuestros compañeros de Ensenada, que elaboran la columna firmada por El Mosquito comentaban con respecto a los "seudoperiodistas", y no puedo estar más de acuerdo, porque es algo en lo que, en lo personal, y junto con otros compañeros he venido insistiendo.
Advertíamos sobre los riesgos que observamos por la aparición de estos individuos, que encontraron un "mercado" desde dónde explotar su ego, y de paso, darse una vida de lujos que no podían costearse anteriormente, y que lo logran haciendo del periodismo su arma de chantaje.
No han entendido, lo mismo que muchas personas dentro de la comunidad, que hablar o publicar conlleva una gran responsabilidad.
Hay periodistas formados en universidades y habemos aquellos que somos empíricos, pero para llegar a donde estamos, tuvimos que empezar desde la posición más modesta, la más humilde, y dedicar 30, 40 o 50 años como en cualquier otro trabajo o profesión.
Para ser considerado periodista, sea académico o de la calle, se debe desarrollar una amplia trayectoria, que es la que a uno le permite aprender qué es, y qué no, lo que se puede hacer o decir. Y no porque se trate de esconder o censurar algo que aparentemente está ocurriendo, sino porque todo trae una consecuencia, que puede ser legal, o que puede pagarse con la vida.
Ahí está el caso de Mariano Soto. Pese a no ser periodista ni tener el mínimo conocimiento de la comunicación, se creyó invencible, se sintió intocable; suponía que era el "terror" de la sociedad, ya que pocos se atrevían a encararlo por temor a su lengua viperina, y terminó asesinado, dentro de su vehículo, cuando se preparaba para provocar otro de sus alborotos, ahora contra la Cruz Roja, no obstante que unas horas antes, ahí le salvaron la vida al sufrir un primer atentado.
En el caso de Ángel Peña, del que no tengo mayores antecedentes (más que los que he escuchado de mis compañeros, tal vez ni siquiera fue el autor material del crimen de Margarito Martínez, ni mucho menos el intelectual, pero en su enorme irresponsabilidad no se dio cuenta que decir lo que dijo podía tener un costo muy alto en sangre, y eso pudo haber sucedido en el caso del compañero fotógrafo, en tanto que él quedó involucrado en un crimen, al ser público y notorio su enfrentamiento con el fotoperiodista.
Como dicen las autoridades: todo lo que digas podrá ser usado en tu contra, y la ley lo toma muy en serio, si queda escrito o grabado.
Peña alega en su defensa que Margarito también hizo acusaciones temerarias en su contra al acusarlo de "halcón" de narcotraficantes, y exponerlo -tal vez- a una suerte similar, y puede ser cierto.
Desafortunadamente, en el caso de Margarito, tal parece que se confió -como a veces sucede con otros compañeros- que por lograr una gran influencia entre las autoridades y apoyo de la sociedad, estiman que pueden estar protegidos, sin alcanzar a ver que pueden sufrir de estas consecuencias.
Entiendo que Margarito recibió comentarios sobre Ángel Peña (que de repente irrumpió en la cobertura policíaca, tal vez confines aviesos), sin embargo, cayó en el error de trenzarse en discusiones con el mencionado, y entrar en dimes y diretes en transmisiones en vivo que hacía, sin preparar alguna pieza periodística que exhibiera a este individuo y comprobara lo que se decía, poniendo en marcha, además, un adecuado sistema de protección que nada tiene que ver con los mecanismos que han formado los gobiernos federal y del Estado, y que no pasan de ser una broma.
En ocasiones, también las autoridades y elementos policiacos tratan de utilizarnos, y uno como periodista, debe estar muy atento a las señales, y no pelear "guerras" ajenas.
Volviendo a los seudoperiodistas, la presencia tolerada de estos individuos, por parte de una comunidad morbosa y unos políticos y gobernantes que luego los protegen y les pagan para utilizarlos contra sus opositores o enemigos, ha hecho que las cosas lleguen muy lejos.
Primero, en lugar de aplicarles la ley o de impedirles el paso a conferencias de prensa, y escenas de crimen, al no estar debidamente comprobada su trayectoria dentro del campo periodístico, les han tolerado, bajo el argumento de que tienen el derecho a dedicarse a lo que deseen siempre y cuando sea legal.
Nada más alejado de la realidad, porque bien pueden ejercer el "derecho de admisión", o exigirles que, como ocurre en farmacias, aparezca, de manera indubitable, un responsable, por cada una de esas cuentas en redes sociales, que de ninguna manera, son medios de difusión.
Por el contrario, les sueltan dinero, bajo el argumento de "publicidad": "porque tienen muchos seguidores", sin siquiera exigir la comprobación de todos los requisitos que se demandan al resto de los medios.
*.- El "fiscarpio" de Baja California
*.- ¿Se "voltearon" diputados?
Pues como era de esperarse: ya tenemos "fiscarpio" en Baja California.
Definitivamente Ricardo Iván Carpio Sánchez era el que menos experiencia como abogado tenía, de la terna que se presentó al Congreso estatal.
Sin embargo, por ir con la "firma" de la gobernadora Marina del Pilar Ávila Olmeda, estaba más que cantado que sería el titular de esta dependencia.
Y a los primeros minutos de este miércoles rindió su protesta en el mismo Congreso, mientras que hay un juicio de Amparo promovido por el COCI de Atilano Peña, y el Colegio de Abogados Emilio Rabasa anunció que continuará "hasta las últimas instancias" con los procedimientos judiciales correspondientes, para garantizar la legalidad de la decisión tomada por los diputados.
Antes de la sesión extraordinaria, nueve de los 25 Diputados encabezados por Marco Antonio Blásquez Salinas lograron que la directiva de la Junta de Coordinación Política aceptara que comparecieran los tres candidatos, petición a la que luego se unieron los legisladores panistas y el propio dirigente Estatal Mario Osuna Jiménez.
Esto no presagiaba, de ninguna manera, que la decisión pudiese cambiar, pero sí puso a sufrir a los legisladores que tenían la consigna de sacar el nombramiento, como eran el propio presidente del congreso, José Luis Molina y Araceli Geraldo, quien estalló, nada más porque no le dijeron "diputada secretaria".
Blásquez Salinas, logró ponerlos nerviosos, e hizo titubear al ahora fiscal, lo mismo que a otro de los participantes que trató de cubrir a Carpio, diciendo que "tampoco se acordaba" de la fecha en que obtuvo su cédula profesional, como previamente lo dijo el ahora fiscal.
Resultó muy gracioso ver cómo de repente, les vino una "oleada" de amnesia a los postulantes al cargo.
La situación se puso tan incómoda que el propio Molina intervino en más de una ocasión, tratando de salvar la situación, pero luego estaba tan feliz de haber conseguido sacar a su candidato, que olvidó cerrar la sesión de manera oficial, por lo que algunos de los diputados, que permanecieron conectados por más de 7 horas, quedaron "congelados" en sus curules.
Molina se había levantado para tomarse la foto con el sucesor de Juan Guillermo Ruiz Hernández, y los dejó ahí, a sus compañeros, en tanto que algunos ya empezaban a platicar coloquialmente, como cuando una de las legisladoras recordó a otro de sus compañeros que sufría de covid, y le sugería que se fuera a descansar.
Y Carpio logró la mayoría calificada, de 21 votos, porque legisladores como Claudia Agatón y Julio César Vázquez Castillo, que son tan ligeros como las veletas, sorpresivamente se fueron con la posición oficial en tanto que "afines" como Gloria Miramontes y Ramón Vázquez "misteriosamente" se desaparecieron al momento de votar. Otra diputada que votó a favor, lo hizo sin saber el nombre de su "favorito", ya que lo mencionó como Carpio González, y luego tuvo que pedir que se rectificara aunque todos se habían quedado callados. Se se registraron los votos, definitivamente en contra, de Marco Antonio Blásquez Salinas y Sergio Moctezuma.
ANA Y CONDA.- Y ¿Dónde están los 100.000 seguidores de esa página, que se irían a manifestar por la detención?
PD.- Lo mismo pensaban cuando detuvieron a Mariano, o cuando lo mataron. Siguen sin querer entender que sus "fans" crecen por el morbo. Caen por algo, y los olvidan. Y al que sigue.
PD1.- Y casi al final de la comparecencia de Carpio, Juan Manuel Molina (perdón, el diputado presidente) le puso la "bola" a éste, para que marcara el gol. O sea preguntas "muy a modo"
PD2.- "Que diga el postulante si fue al kinder Montessori o a algún otro sistema"
PD3.- Licenciado ¿es verdad que casi todos sabemos querer, pero pocos sabemos amar?
PD4.- Licenciado Carpio, complete usted la frase... "Pinpón es un muñeco..."
PD5.- Perdón pero no me pude sustraer de la tentación de escribir aquí, lo que un compañero me compartió sobre lo que pudieron ser las preguntas de los diputados y Molina al nuevo fiscal.
PD6.- Quien diga que no se divierte viendo una sesión del Congreso local, es... que no sabe vivir.
PD7.- ¿Qué sentirían los otros dos candidatos que tuvieron que aguantarse sus comparecencias, a sabiendas de que iban de relleno?
PD8.- Más digno el último de los integrantes de la terna: "quiero ser fiscal para poner en marcha los 22 años que tengo de experiencia".