CIUDAD DE MÉXICO CDMX 21 DE ABRIL DE 2025 (AFN).- En respuesta al gobierno de Ecuador sobre una alerta de seguridad interna, del supuesto arribo de sicarios mexicanos para cometer ataques e incluso atentar contra la vida del mandatario Daniel Noboa, la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo rechazó tales versiones y la "reiterada e inescrupulosa creación de narrativas".
El gobierno ecuatoriano dio a conocer que, mediante labores de inteligencia, "el Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas (Comaco)" emitió una advertencia y se activó un mecanismo de protección para evitar el supuesto ataque contra Noboa.
El "mensaje militar", considerado como "urgente", fechado en Quito el pasado jueves 17 de abril de 2025, incluye "alerta y recomendaciones" con base en los resultados electorales del 13 de abril, donde Noboa ganó su reelección, lo que sus opositores han calificado como "el mayor fraude que han visto los ecuatorianos".
En el documento se indica que tuvieron conocimiento que "se ha iniciado traslados de sicarios mexicanos y otros países hacia el Ecuador, con la finalidad de realizar atentados terroristas", contra el presidente y varios de sus colaboradores de gobierno; además de otras acciones que buscan desestabilizar al país.
Al respecto, Sheinbaum Pardo comentó: "No dice que lo mandó la presidente, dice 'enviados de México'; se hizo una respuesta por parte de (la Secretaría de) Relaciones Exteriores negando esto, y además pues no dice ni siquiera de dónde venía la información o cuáles son sus pruebas".
La mandataria dio lectura en pantalla al comunicado oficial de México, donde la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) "rechaza tajantemente la reiterada e inescrupulosa creación de narrativas en comunicados oficiales y/o filtraciones de documentos oficiales, que aludan a México como fuente de supuestos actos delictivos o situaciones internas en ese país".
La presidenta reiteró que la ruptura de relaciones diplomáticas con Ecuador -aún no restablecidas- ocurrió por la irrupción violenta de autoridades a una embajada mexicana en Quito, el 5 de abril de 2024, lo que es considerado una "grave y flagrante violación al derechos internacionales".