Tijuana BC 23 de mayo de 2015 (AFN).- En las instalaciones de la Dirección de Policía y Tránsito Municipal ubicadas en la Ciudad Industrial de Otay, se rindieron las honras fúnebres al oficial Juan Gualberto Jáuregui Ruvalcaba, en las cuales estuvo presente el alcalde Jorge Astiazarán Orci, quien se negó a dar declaraciones o alguna postura oficial al final del evento.

En el acto funerario en el que también estuvieron familiares, amigos y compañeros del policía, quien fuera asesinado en días pasados afuera de su domicilio cuando se disponía a iniciar su jornada de labores, fue encabezado por el presidente municipal y Alejando Lares Valladares, Secretario de Seguridad Pública Municipal (SSPM).

El féretro con los restos de Jauregui Ruvalcaba estuvo al centro del evento con una guardia de honor de sus compañeros, en la que también participaron los funcionarios municipales.

También se realizó el último pase de lista, en el que se escuchó cómo sus compañeros coreaban la palabra "¡Presente!", al escuchar el nombre del compañero caído.
El alcalde y el titular de la SSPM entregaron a los familiares del oficial el cubre féretro y una fotografía del finado, y posteriormente se exhibió un video con varios momentos de la vida del policía.

Durante la ceremonia luctuosa, el alcalde resaltó que el gobierno de la ciudad mantiene estrecha relación con el Ejército Mexicano y demás corporaciones policiacas, para mantener el orden en la ciudad.

"A la familia del oficial Jáuregui le reitero mi apoyo ante esta situación, y a los mandos y la tropa les pido que redoblen su esfuerzo en su lucha diaria por salir a proteger a los ciudadanos, para que el sacrificio de este agente no haya sido en vano", abundó el primer edil.

Al final de la ceremonia, los reporteros que acudieron a cubrir el evento buscaron una declaración o postura oficial de Astiazarán Orci, quien se negó a conceder entrevistas explicando que habría una rueda de prensa hasta el lunes y ahí lo haría con más calma.

El titular de la SSPM tampoco concedió entrevistas, subió a la camioneta del alcalde y se retiró con el cortejo fúnebre para trasladar los restos del oficial a su casa y posteriormente al panteón para darles se sepultura.