Por: Nancy Sánchez Arredondo

Se podía percibir en la atmósfera la irritación ciudadana.

La gente habló fuerte a través de su voto...y decidió con claridad.

Las urnas hablan...gritan.

José Antonio Meade K, no sólo representaba el mejor perfil para conducir las riendas de este país, además que viste generosidad y humildad, dio muestras de esto al ser el primero en reconocer que la tendencia no nos favorecía.

En medio de esta vorágine de sentimientos encontrados, no puedo dejar de decir, que el PRI auténtico… ese que se ha forjado al rojo vivo sigue de pie...

Y NUNCA me voy a dejar vencer.

Sin embargo, estoy obligada a reconocer también, los errores cometidos. Nos urge avanzar hacia una necesaria reconstrucción.

Y reconstruir No significa cambiar de rostro, o de siglas...

Debe darse desde adentro, de las entrañas...

Cuidado con pensar solo en transformaciones cosméticas....

Es innegable la urgencia de una severa introspección que conduzca a cambios de fondo.

Debemos de entender de una vez por todas, que el PRI no es propiedad de nadie…su dueño es la militancia y se debe nutrir de ciudadanía.

...El PRI de la mal llamada clase política ha terminado.

...El PRI de los excesos…de los que defraudan la confianza ciudadana...ha recibido acta de defunción. 

Me duele que las grandes transformaciones y reformas emprendidas por EPN se diluyen por las acciones negativas.

Es el momento de iniciar una verdadera transformación... Una evolución para estar a la altura de esta nueva ciudadanía que nos observa y nos sentencia.

Sin dejar de reconocer las fallas, reitero mi compromiso, mi orgullo de militante y mi convicción por una urgente renovación de pensamiento.

Porque no hay mal que por bien no venga.

No es momento de aflicción, sino de reflexiones. No es hora de lamentos, sino de decisiones.

No es tiempo de claudicar, sino de reivindicar.

A los priistas de sangre…

A la auténtica militancia les digo:

En la alternancia radica la verdadera esencia de la democracia.

La grandeza del PRI requiere una militancia que con humildad emprenda cambios de fondo.