CIUDAD DE MÉXICO 21 DE NOVIEMBRE DE 2016 (Kaleydoscopio).- El abuso sexual infantil es una maldición social en el mundo contemporáneo y 47.6% de los mexicanos cree que quienes lo cometen son parientes de la víctimas, además que señalan que la pérdida de valores, desatención paternal y “cacería” que hacen pederastas en las redes sociales.

Un estudio de Gabinete de Comunicación Estratégica (GCE) deja ver que además de los parientes, los abusadores de infantes son adultos/hombres, dice 9.4%, personas enfermas, 6.4%, pervertidos, 4.3%, viejos, 4.3%, allegados o profesores, 4%, sacerdote, 3.6%, padrastro, 3.1%.

Los casos de sacerdotes que abusan sexualmente de los niños son numerosos en diversos países y 84.5% de los 600 entrevistados por GCE cree que a esos curas pervertidos la iglesia católica hace mucho por protegerles. Solo 8.5% piensa que la jerarquía hace lo posible por entregarlos a las autoridades.

¿Cuál cree usted que sea el factor principal de los tres que le voy a mencionar que sea el causante de los abusos a menores? Preguntaron y 40.8% dijo que tiene que ver con la pérdida de valores en la sociedad.

32.2% de la gente piensa que las agresiones sexuales a infantes se dan debido al descuido de madres y padres, en tanto que 19.7% lo atribuye a que las redes sociales son aguas en las que los pederastas enganchan a los menores.

En los llamados telefónicos hechos a hogares de todo México, GCE encontró que 29 de cada cien personas creen que los niños no tienen ninguna confianza en sus padres como para contar que son víctimas de un abuso.

Para 45 de cada centenar de encuestados existe poca confianza para denunciar una situación así por parte de los niños, mientras que 23 piensan que hay algo o mucha confianza como para decir a los padres algo tan grave.

Gabinete (www.gabinete.mx) pidió a la gente que hablará   sobre las cosas que influyen para que un niño no hable de un abuso sexual:

Según 95.9% el silencio se debe a que el agresor lo tiene amenazado.

Para 94.1% de los entrevistados dice que todo se debe a que el abusador es miembro de la familia o una persona cercana.

El que piensen que miente es algo que obliga a las víctimas a quedarse calladas, dice 87.1%.

Un falso sentimiento de culpa impide que los menores denuncien a quien abusó de ellos sexualmente.

En este delicado terreno, los encuestadores indagaron sobre por lo que sabe o ha escuchado la gente ¿qué tanto les creen los padres a los hijos que les cuentan o denuncian que han sido víctimas de abuso sexual?:

21.4% piensa que los padres creen mucho ante una denuncia de esta naturaleza, 35.2% indica que algo de credibilidad es la que otorgan.

Pero 35.2% señala que se les cree poco a los menores que denuncian y 7.3% de plano piensa que no se les cree nada.

Los mexicanos tiene idea que solo 29.2% de los casos en que se sabe de un abuso existe denuncia. Los padres o personas cercanas dejan en la impunidad los abusos sexuales a menores, afirma 66.9% de los mexicanos.

Las cuatro principales razones por las que no hay denuncia, de acuerdo con el trabajo de opinión entre quienes no alzan la voz son: miedo (28.2%), vergüenza de exhibir a los niños (21.2%), por descrédito de las autoridades (20.7%) y para evitar conflictos familiares o amenazas (12.5%).

Hay quien cree que todo queda en las sombras porque la gente no sabe ante quién denunciar (6.7%), porque no creen totalmente en sus hijos (5%) y por irresponsabilidad paterna (2.7%).

La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico tiene a México en el oscuro primer lugar mundial en abuso sexual, violencia física y homicidios de menores de 14 años.

El dato escalofriante solo era conocido por 37.6% de los mexicanos, 62% no tenían idea del tamaño de las agresiones de todo tipo contra los menores.

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