TIJUANA BC 16 DE JUNIO 2019 (AFN).- A pesar del acuerdo entre Estados Unidos y México, en el que éste fungirá como “tercer país”, a fin de evitar una imposición de aranceles del 5% a las importaciones mexicanas, se mantiene latenta la aplicación de esta posibilidad y costaría a nuestra nación hasta 88 mil millones de dólares, advirtió el Doctor, Eduardo Mendoza.
El director del Departamento de Estudios Económicos de El Colegio de la Frontera Norte (El Colef), señaló que pese al acuerdo del siete de junio anterior, el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump dio un plazo de 45 días para solucionar el tema de los migrantes, de lo contrario aplicaría aranceles que aumentarían hasta llegar al 25%.
Tras advertir que la aplicación de aranceles a la importaciones tendrían consecuencias catastróficas para la economía mexicana, el investigador expuso que “en 2018 el valor de las importaciones de México a Estados Unidos fue de 346 mil millones de dólares. Una imposición de 5% en aranceles provocaría que se perdieran 20 mil millones de dólares, si sube al 25% serían pérdidas con un valor de 88 mil millones de dólares”.
El especialista manifestó que los sectores más afectados por la imposición de aranceles serían el automotriz, que exporta 93 mil millones de dólares; productos electrónicos con un valor de 66 mil millones y petróleo con 15 mil millones.
Dijo que ante este escenario, diversos sectores han señalado la importancia de diversificar el comercio de México hacia otros países.
Para el Doctor Mendoza “esto funcionaría en el mediano y largo plazo, dado que se tienen que contemplar el tamaño de las economías de otros países y los costos de transporte, entre otros indicadores”.
Considerò que una medida a corto plazo podría ser apostar a la política interna de Estados Unidos. Aprovechar la relación comercial existente en estados como Texas, California y Michigan, así como en Wall Street o la industria automotriz.
Tambièn propuso que serìa oportuno imponer aranceles a ciertos productos que exporta Estados Unidos a México, para que estos sectores presionen al presidente Donald Trump de no aplicar aranceles, “esta medida sería más de corte político que económico”.