*.- “Después ya veremos”, dice sobre la gubernatura

TIJUANA BC 12 DE MARZO DE 2019 (AFN). – “No digo que me den por muerto, nada más que me den por ocupado hoy en otras cosas. Ocupados en esta responsabilidad. Después ya veremos”, respondió Gustavo de Hoyos Walther, dirigente nacional de la Coparmex, al hablar sobre la posibilidad de buscar la candidatura a Gobernador de la entidad.

Entrevistado en AFN POLITICO Y ALGO MÁS, el mexicalense reiteró que la única elección que le interesaba ganar es su cuarta reelección como dirigente nacional del sindicato patronal, responsabilidad que deberá atender hasta diciembre próximo.

“Hasta el 31 de diciembre y después veremos cómo participar, esta es la cancha que hemos elegido. Agradezco siempre las buenas intenciones de amigos pero no por mucho madrugar amanece más temprano”, aseguró el empresario. “las aspiraciones tienen su momento y su circunstancia, no es que algo que este en mis sueños ni tampoco en mis pesadillas”.

El también presidente del patronato de la Universidad Autónoma de Baja California, calificó como delicada la situación económica que atraviesa la institución, debido al retraso en los pagos de parte del gobierno estatal, y confió que a más tardar el próximo viernes, el gobernador cumpla su compromiso de entregar al menos 100 de los casi mil millones de pesos que constituyen el adeudo.

En caso contrario, se corre el riesgo de cancelar la convocatoria para nuevos alumnos y la posibilidad de recortar programas diversos en investigación, difusión de la cultura, deporte y formación docente, todo eso, señaló, está sobre la mesa. 

Mientras ese momento llega, pidió a los alumnos universitarios que anuncian manifestaciones de protesta esperar un poco lo que calificó como un “margen de maniobra” para lograr la solución deseada.

El dirigente empresarial declinó calificar las razones por las que el gobierno estatal cayó en insolvencia financiera, y lo atribuyó a una injusticia en el trato de la federación, combinado con malas decisiones locales y “nadie puede eludir su responsabilidad”. 

“Seguramente un manejo en el ámbito local que no fue todo lo cuidadoso y previsor que se hubiera deseado para que un evento de esta naturaleza no se pudiera presentar”, abundó De Hoyos Walther. “Desde luego que hubo decisiones que pudieron haber sido mucho más razonadas. Se invirtió en temas como la compra de tierra para un aeropuerto en Ensenada que finalmente no se concretó. Seguramente estos y otros recursos que se han invertido en otros proyectos se hubieran llevado para salvaguardar la operación básica que se requiere”.

Lo comparó con decisiones domesticas en las que en lugar de guardar lo necesario para pagar la luz y comprar comida “me pongo a comprar una televisión de 60 pulgadas. Evidentemente hay que saber que va primero y que va después”.

En este sentido sostuvo que la ley tiene que cumplirse, particularmente en materia de fiscalización y el gasto público porque ninguna violación se justifica, y si existe algo que se haya apartado de la legalidad no debe tolerarse.