*.- Pudiera perder licencia de operación Grupo Melo

TIJUANA BC 11 DE JULIO DE 2018 (AFN).- Se requieren 18 millones de pesos para demoler construcciones que aún se encuentran en peligro de caer debido al deslizamiento de tierra en la colonia Lomas del Rubí, informó el secretario General del Ayuntamiento, Leopoldo Guerrero.

Al ofrecer detalles de la situación que prevalece en la zona donde un centenar de familias perdieron sus viviendas completamente, y otras se mantienen a la expectativa de que al seguir moviéndose el suelo, pudieran afectarse de igual manera, el funcionario municipal explicó que se tiene un estudio de cuantas casas están en peligro, pero ahora se valora los costos de remover los inmuebles que estén a punto de caer.

Guerrero apuntó que el precio “es bastante oneroso, porque el hecho de tumbar implica meter maquinaria, lo cual impacta en el suelo”. Añadiendo que “la primera parte sale cerca de 18 millones de pesos, y obviamente no lo tenemos, por eso hay que buscar opciones” dijo.

En relación a los sellos de clausura que se instalaron a maquinaria de la constructora luego de que ayer intento continuar realizando maniobras de movimiento de tierra en la parte baja de la zona siniestrada en Lomas del Rubí, el secretario del Ayuntamiento resaltó que de seguir  con estas acciones la empresa Melo puede ser  acreedora a que se le suspenda incluso la licencia de operación en el municipio.

Leopoldo Guerrero anunció que debido a la intención de realizar trabajos a pesar de estar suspendida la obra en específico, la empresa Melo será sancionada con un monto aún por definir.  

Sobre cómo se dieron los hechos de clausura este martes, el funcionario explicó que fue a raíz de una denuncia directa por los propios vecinos de Lomas del Rubí, y cuando se envió a inspectores municipales se  constató  que efectivamente se realizaban trabajos en la obra que corresponde al fraccionamiento Valles del Pedregal, a pesar de existir una suspensión indefinida por parte de la autoridad municipal debido al proceso que se sigue ante el deslizamiento de tierra en el mes de febrero.

“Lo que se hizo fue garantizar de que no se continuara con esto, poniéndole sellos a los accesos, y a la maquinaria que se encontraba dentro de las instalaciones” abundó.

Aseveró que se tiene la preocupación de que al “invadir” la zona afectada se pueden venir más derrumbes. “Una vez que existe una sanción y existe una clausura, si se violenta se puede llegar hasta la suspensión de licencia de operaciones de la empresa” reiteró.