Los amantes de lo ajeno parecen ya no tener límites, en este primer semestre del año el robo en iglesias y a feligreses que acuden a los templos católicos ha ido en aumento en la capital del estado, lo que ha causado que los dirigentes de la Iglesia Católica hayan tenido que tomar la iniciativa de llamar a elementos de seguridad privada para que ayuden a resguardas las instalaciones y sus alrededores, informó el Vocero de la Diócesis de Mexicali, Yoshio H. Chao Soto.

Al punto están las cosas que a algunas iglesias les han tenido que instalar cámaras de vigilancia, “pues ya no se detienen ante el templo, en algunos de los templos de nuestra localidad, inclusive en el Valle de Mexicali, ha habido robos; se ha cometido pues vandalismo y a partir de eso pues permaneces más atento”, declaro el también párroco de la iglesia Mather Dolorosa.

La cantidad de feligreses que acuden a misa principalmente los domingos, también ha resultado un imán para los amantes de lo ajeno, muchos de los vehículos han sido bandalizados o robados, aprovechando que la gente está dentro de los templos.

El vocero mencionó que “en lo que va inclusive de este año vemos que se ha generado más y más, porque la misma gente me lo comenta”.

A mediados del mes de febrero dos campanas que adornaban la fachada de la iglesia de Nuestra Señora del Pilar, simplemente una mañana ya no estaban; la iglesia está ubicada en la avenida Mar Egeo y Océano Índico, en las inmediaciones de las colonias Anahuac y Constituyentes en Mexicali, el padre Rubén Magallanes Medína, párroco del templo, menciona que vieron dañada la loseta y por las condiciones suponen que jalaron las campanas con algún equipo especial a altas horas de la noche.

El robo ocurrió hace varios meses, pero hasta la fecha ni pistas han dado las autoridades sobre este robo, explica el padre Magallanes.

Eva Canales, creyente católica, expresó que “ya no respetan nada, ni eso, no es la única iglesia, yo supe que también en la iglesia de Infonavit robaron la campa”.

El padre Magallanes ya perdió la esperanza de recuperar las campas, al considerar que muy probablemente ya hayan sido fundidas, pero por fortuna cuentan con una campana mayor para seguir llamando a misa.

Hay varias actualmente que han sido robadas hasta en más de tres ocasiones, y lo peor es que ni lo robado ha sido recuperado ni los ladrones han sido detenidos, comentó Yoshio H. Chao Soto.