• Confirma también que la sociedad puede lograr el cambio: Luis Moreno
TIJUANA BC 20 DE JULIO DE 2017(AFN).- La cancelación de la obra del acueducto que abastecería de agua a la cervecera Constellation Brands en Mexicali, es la confirmación de que los agricultores tenían la razón en cuanto al daño que ocasionaría la misma al medio ambiente y a las reservas del acuífero y confirma también que cuando la ciudadanía toma la plaza pública para pelear sus derechos, el gobierno debe dar marcha atrás a decisiones autoritarias, afirmó el dirigente estatal del Partido Encuentro Social, Luis Moreno Hernández.
El también diputado local exhibió la contradicción en que incurrieron tanto el gobernador Francisco Vega de Lamadrid, y Manuel Guevara, titular de SIDUE, al tratar de justificar la cancelación de obra luego que el gobierno federal decidió no otorgar el permiso correspondiente por falta de manifiesto ambiental.
Hoy – señaló el legislador- Manuel Guevara dice que la cancelación de este acueducto se dio porque a la empresa que ganó la licitación de la obra, Urbaca, “una que empresa que por cierto, gana y gana licitaciones y adjudicaciones por ser gente muy ligada al gobierno del estado” no había tenido los permisos de manifiesto ambiental.
Por su parte el gobernador afirma que la obra se suspendió por falta de agua, y entonces si no había manifiesto de impacto ambiental, y si lo que dicen los agricultores ahora se sabe que es cierto, que esta obra iba a traer un profundo daño al medio ambiente y a la economía y el patrimonio de los bajacalifornianos, particularmente de los mexicalenses, ¿por qué se tomó la decisión de hacer la obra?.
Un vez aceptado que no había agua, “como dice Kiko vega, en esas contradicciones que mantiene siempre, ¿para qué licitan obra. De parte de quien están, de parte la gente o de parte de los intereses privados, de parte de la sociedad o de parte de las corporaciones, de parte del sentido común y de la razón o de parte del dinero?”, cuestionó Luis Moreno.
Como se anunció la víspera, la Comisión Nacional del Agua decidió no otorgar autorización para la extracción de agua del acuífero mexicalense, que sería conducida a la cervecera a través del acueducto Villa Hermosa-Mexicali, una obra de 47 kilómetros de longitud y costo superior a los 500 millones de pesos.
En opinión de Moreno Hernández, la cancelación definitiva de la obra le da la razón a la sociedad y a los grupos que se manifiestan, y por ello agradeció a los agricultores de Mexicali y movimientos sociales como Mexicali Resiste, así como los grupos de abogados que participaron, “el que nos sigan dando la muestra de que cuando la ciudadanía decide activamente ir a la calle, a la plaza pública, al lugar donde se están llevando a cabo las injusticias, a pelear por sus derechos, el gobierno da marcha atas a decisiones arbitrarias y autoritarias como estas”.
Esto, agregó, nos permite pensar y esperar que en Baja California sea posible un cambio y una transformación como la que todos los ciudadanos esperan. “Yo creo que ya estuvo bueno de tener un gobierno que nos gobierna a base de improvisaciones y ocurrencias, pero sobre todo de intereses no del todo claros”.
