Por: Gerardo Fragoso M.
MEXICALI BC 9 DE DICIEMBRE DE 2016 (AFN).- Con el objetivo de que la administración federal les entregue más dinero, a través de lo que llamaron un "fondo de fronteridad", con el cual enfrentarían los gastos adicionales por el arribo de migrantes y una eventual deportación masiva de mexicanos, gobernadores fronterizos de oposición suscribieron lo que llamaron un "pacto", durante una reunión sostenida en esta capital.
Javier Corral Jurado, Francisco Javier García Cabeza de Vaca y Jaime Heliodoro Rodríguez Calderón, mandatarios de Chihuahua, Tamaulipas y Nuevo León, respectivamente, acordaron con su anfitrión, el gobernador bajacaliforniano, Francisco Arturo Vega De Lamadrid, dicha acción, la cual dieron a conocer en un encuentro con los medios, posteriores a su charla.
Rodríguez y Corral fueron los más incisivos en sus expresiones.
Luego de que Corral le pidió "que se eche pa'delante", Rodríguez manifestó que buscarán que la Conferencia Nacional de Gobernadores (Conago), "deje de ser un elemento palero", aseverando que "el Pacto Federal no es 'todo para el centro'. Es, precisamente, la equidad".
Corral fue más elegante, pero externó que en la misma organización buscarán "discutir una nueva manera de redistribución del ingreso fiscal en nuestro país, de tal manera que haya criterios más objetivos, mecanismos e incentivos para aquellos estados que (más) aportan a la federación, y que deben recibir de la federación un trato justo y equitativo".
Afirmó que una hipotética expulsión a gran escala, en el inicio de la administración estadounidense liderada por Donald Trump, los tomaría con los dedos en la puerta, puesto que "no tenemos los recursos que supone una deportación masiva. Hay que decirlo: Incluso nos sacaría de balance si el comportamiento de la deportación de migrantes mexicanos desde Estados Unidos varía, simple y sencillamente, al doble de lo que hemos tenido ahora, anualmente hablando. Mucho menos si es masiva".
"Suponer que estamos listos para una deportación masiva, que en el primero, o en dos años, nos deportara tres millones, como lo ha advertido el presidente electo en su plan de 100 días, pues por supuesto que esto generaría muchas complicaciones", reiteró.
Y sentenció: "La gran noticia de hoy es que los gobernadores de la frontera norte hemos decidido hacer una alianza, un pacto entre nosotros, para la defensa de los derechos humanos de los migrantes, pero también de la realidad social que enfrentamos como frontera".
Mucho más evasivo que sus homólogos, Vega se fue por las cifras. Indicó que, en el presente año, han llegado "50 mil repatriados por Tijuana y Mexicali", de los cuales un "19% se quedan en Baja California", situación a la que se debe sumar el arribo de "18 mil migrantes de procedencia haitiana y africana".
Afirmó que "la mejor medicina es la prevención", ante la próxima investidura de Trump, y que su petición de mayores recursos es "previendo lo que pudiera suceder", si bien los cuatro mandatarios admitieron no tener claro cuánto dinero buscan, aseverando que necesitan hacer un mayor análisis, pues, de acuerdo con Vega, aunque "todos tenemos un problema que tiene que ver con la migración", los matices "son muy distintos".
Reconoció que el comportamiento de los bajacalifornianos "en la bienvenida y en el trato a los migrantes haitianos y africanos", que calificó de "gran participación ciudadana", ha aliviado a su administración en dicho galimatías, pues "sin ello, lo tengo que decir clara y llanamente, estaríamos mucho más comprometidos en la asistencia que estamos obligados a darles".
Vega indicó que se erogarán 35 millones de pesos en la atención a migrantes haitianos y africanos, hasta el 31 de diciembre.
Quien tropezó fue García, pues desconocía, incluso, cuántos mexicanos habían sido deportados en este año por la frontera de su entidad.
Los mandatarios deseaban evadir la notoria ausencia de los mandatarios priistas Claudia Artemiza Pavlovich Arellano, quien gobierna Sonora, y Rubén Moreira Valdés, titular del Ejecutivo coahuilense, pero, al final y a pregunta expresa de un reportero, Vega explicó, parcamente, que "se invitó a todos", indicando que Pavlovich "se disculpó por (tener) una reunión muy importante de la Ciudad de México", mientras que de Moreira simplemente dijo que "se disculpó".
