Expone matrimonio gay vida en pareja
Agencia Fronteriza de Noticias
IZZI
VOTAR ES UN DERECHO Y UNA OBLIGACIÓN. VOTA ESTE PRÓXIMO 2 DE JUNIO
Programas Keila
Programas Villegas
Translate this website into your desired language:

Expone matrimonio gay vida en pareja

TIJUANA, BC - martes 16 de septiembre de 2014 - AFN.
3790
*.-Viven en BC, les costó más caro casarse fuera de Tijuana
*.-Buscan equiparar sus derechos para garantizarse seguridad social
*.-Parejas gays son más estables
 
Tijuana BC 14 de septiembre de 2014 (AFN).- Orlando Tornez Cortez, de 29 años; y John Richard Luna, de 47, son un matrimonio gay que vive en Tijuana, Baja California, como “otros tantos más que no son fáciles de sondear pero que existen dispersos en la entidad”, como refieren ellos mismos; en su caso, contrajeron nupcias en la Ciudad de México hace más de un año, el 26 de junio de 2013.
 
Recién celebraron su primer aniversario de bodas, y en entrevista exclusiva con Agencia Fronteriza de Noticias (AFN), exponen que a parejas como ellos les cuesta "dos mil por ciento" más caro casarse, en relación a parejas heterosexuales, ya que deben hacerlo fuera de la entidad porque no existen aún las reformas al Código Civil y a la Constitución Política del Estado de Baja California para que contemplen y se validen los matrimonios entre personas del mismo sexo.
 
Los esposos revelaron también, que en la entidad podría haber cerca de cuatro matrimonios más que hayan seguido este trámite y que se encuentren viviendo de forma permanente o temporal en esta región, y algunos de ellos se cuentan entre sus amigos.
 
“El tema de las parejas, o más bien, de los matrimonios gays ha tomado gran importancia debido a los chicos de Mexicali que ganaron el amparo (de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, Víctor Aguirre Espinoza y Fernando Urías Amparo), pero era una realidad que existía desde antes” en la región, dijo Tornez Cortez, mientras sostenía entre sus manos el acta de matrimonio que le otorgó el Juez del Registro Civil, Héctor Maldonado San Germán, en el Distrito Federal, inscrita con número de acta 1392 y número de folio 35478926.
 
Enseguida de mostrar un nutrido álbum de fotografías, recuerdos y videograbaciones de la fecha que quedó fija en su memoria, dijo que esto “cambió radicalmente su vida y lo hizo la persona más feliz”, además de referir la impotencia que se siente al ver que sus derechos “no valen” para algunos bajacalifornianos, ya que al intentar realizar
diversos trámites relativos a su pareja, no le han permitido hacerlo por falta de reconocimiento legal a este documento emitido en el Distrito Federal.
 
Dado que no se le da la validez necesaria, dijo John por su parte, no han podido acceder a beneficios que tiene cualquier otra pareja “hetero” cuando se amerita, como es el acceso a los servicios médicos. "Tenemos que acudir a médicos particulares porque no podemos asegurarnos mutuamente en clínicas públicas”, manifestó.
 
De igual manera, enlistó las cantidades de dinero que les ha costado lograr casarse bajo lo que denominó “la Ley del Hombre”.
 
“Como mi esposo –dijo Orlando- es ciudadano americano, nos pidieron hacer unos trámites excesivos, tuvimos que traducir sus actas al español y esperar en el Distrito Federal a que nos dieran fecha para casarnos; lo cual repercutió en perder días de trabajo, pagar hospedaje, comidas, papeles y la espera, pues es un trámite que se tiene que hacer con mucho tiempo de anticipación”, subrayó.
 
Agregó que, según sabía, a una pareja de hombre y mujer le cuesta alrededor de mil pesos más o menos casarse por la vía legal, pero que ellos tuvieron que pagar inicialmente ocho mil pesos de boletos de avión, dos mil pesos por traducción de actas, 12 mil pesos de hospedaje y comidas durante casi un mes, pues el Registro debía
validar la documentación; también el costo del acta de matrimonio por 950 pesos, entre otros costos añadidos que les resultaron en alrededor de 25 mil pesos, esto sin incluir un festejo.
 
“Al final, muy apenas nos alcanzó para el traje, pero todo valió la pena porque es lo que queríamos, aunque sabemos que a lo mejor muchas parejas que lo desean, tal vez no tengan los medios y es comprensible, porque ya vimos que sí es costoso”, afirmaron.
 
Defienden sus derechos
Orlando y John coincidieron en que, más que buscar que la sociedad "les apruebe estar juntos”, lo que esperan es garantizarse seguridad social mutuamente, porque conocen que la forma de pensar de la gente “no cambia o si cambia será de manera muy gradual”.
 
Refirieron que, como cualquiera, tienen derecho a defender sus patrimonios y a compartirlos con la persona que deseen, sin que esto sea injerencia de extraños.
 
Por el momento, ambos se consideraron afortunados porque, pese a todo, tienen total apoyo de parte de sus familiares, quienes los acompañaron "en sus dos bodas, la de mentiritas y la de verdad”, refiriéndose a que hicieron festejos previos y posteriores a la de la ceremonia civil.
 
También porque próximamente, Orlando recibirá noticias sobre la solicitud de ciudadanía que hizo para emigrar a Estados Unidos, o, en su defecto, para poder acompañar a su pareja a cuidar de su familia, pues “últimamente su papá ha estado muy enfermo”.
 
Aparte, reconocieron el esfuerzo que están haciendo por separado las parejas que quieren contraer nupcias, especialmente el precedente de Ley que sentaron Aguirre y Urías, a quienes desearon suerte; y manifestaron apoyo a parejas, organismos y asociaciones de defensa de ciudadanos no heterosexuales, quienes juntaron firmas para lograr un amparo colectivo que logre modificar el Código Civil referido.
 
Estas parejas, las más estables de acuerdo a información consultada en Internet y con base en estadísticas del Registro Civil de la Ciudad de México, de las de las 4 mil 35 uniones entre personas del mismo sexo que se han celebrado desde 2008, cuando se volvieron legales los matrimonios gay, únicamente hay formalizados a la fecha alrededor de 34 divorcios.
 
Las cifras muestran que se divorciaron 19 parejas de mujeres y 15 de hombres, la mayoría mexicanos excepto el caso de un extranjero que se registró en enero de 2014; en general, los divorcios se dieron entre personas que se casaron entre los 21 y 30 años.
 
“Desde que se autorizaron estos matrimonios podemos ver que se trata de parejas estables; cuando ellos deciden contraer matrimonio lo hacen por amor y porque se conocen, sin que haya la obligación de hacerlo por la existencia de hijos; esto nos ha dado una perspectiva en cuestión de la sociedad, pues no se han presentado muchos divorcios”, explicó el director del Registro Civil, Héctor Maldonado, durante una entrevista reciente con un medio nacional.

Ayuntamiento Bullying
Poli Egresados
Matemáticas Fáciles
21 Aniversario
IZZI Abril 2024
PBM Medicina
Buscador Acerca de AFN Ventas y Contacto Reportero Ciudadano